Es el nombre interno y popular que recibe el Hospital de Parapléjicos de Toledo.
Ya he comentado en otras entradas que la llegada al Hospital, produce, especialmente en los familiares, un gran impacto y el sólo rótulo "parapléjicos" supone ya la ubicación definitiva en la lesión. Muchos familiares evitan que el paciente conozca el nombre del Hospital al ingreso. Hay algunos familiares que se nos han quejado porque las sábanas o las batas están rotuladas con dicho nombre. Hay una intención y tendencia a aplazar la información hasta que ya no quede más remedio que enfrentarse a ello.
Las dos expresiones que más se oyen al llegar al Hospital por parte de los profesionales son : "Tranquilo, paciencia" y "Poco a poco". De ahí que la sabiduría popular, de nuevo, haya bautizado al Hospital con ese nombre. Además de gracioso, minimiza mucho el impacto y favorece el entender la filosofía con la que trabajamos : objetivos a corto plazo que, dicho en palabras más sencillas, equivale a eso, "poco a poco".
Cuando se sufre una lesión medular y uno pasa tanto tiempo en decúbito supino y mirando al techo, se le pasa toda su vida por la cabeza en un segundo. La tendencia es pensar en lo que se tenía y se perdió y en lo que se hacía y ya no se puede hacer. De ahí este trabajar por objetivos, sin adelantarnos en el tiempo y "poco a poco" al que hacía antes mención lo que permite avanzar despacio en la rehabilitación y asumir de forma progresiva la lesión y sus consecuencias.
Tiene que ser duro, desde luego, acostumbrarse a recuperar "poco a poco" las capacidades que uno ha perdido y a las que, quizás, hasta entonces no les daba el valor que realmente tenían.
ResponderEliminarEs difícil aceptar tener que vivir con una minusvalía, por eso es maravilloso ver como tantas personas son capaces, aunque sea lentamente, de superar las trabas que encuentran en su camino y salen adelante asumiendo su lesión y las consecuencias que ésta conlleva. Algunos incluso llegan a dar más sentido a su vida.!Bravo por ellos¡
Ánimo desde aquí a todos esos profesionales que, cada día, con su incomiable labor consiguen que innumerables pacientes puedan llegar a rehabilitarse no sólo físicamente sino también moral y psicologicamente.
El paciente lleva la peor parte, sin duda, y algunos no alcanzan las metas que se ponen al ingreso, que suelen ser elevadas. El trabajo de los profesionales, en cambio, no es tan duro como se ve desde fuera ya que es muy gratificante contribuir a la mejora de la calidad de vida de los lesionados y ver como rehacen su vida tras la lesión. También nos ayudan a valorar lo que tenemos y a tomar conciencia de que la vida es un valor en alza y hay que sacarle el mayor partido posible. Los lesionados medulares no se bien por qué razón, suelen conectar muy bien con la gente y dejan un buen "sabor de boca" en las personas ( profesionales y no profesionales) con quien se relacionan.
ResponderEliminarTe agradezco, Pilar, no obstante, el aliento que transmites a los profesionales pues a veces se valora poco su trabajo. Algunos hacen un trabajo muy duro y poco reconocido como son los celadores o auxiliares a quien les toca "bregar" con tareas que creo que no se pagan con dinero.
La verdad que si es duro, despertar un día y ver donde estas y como estas. No te dejan moverte de la cama, con unas pesas en la cabeza, que después comprendes el porqué de ello, pero no en ese momento. Pero en ese caso ni la familia, creo que está preparada para darte una explicación. Yo solo veía, mi familia, enfermer@s, mis dos compañeras en sillas de ruedas (algo que no llegaba entender), mi médico y como no esa gran profesional donde las hayan (ella sabe quién es, no hace falta decir el nombre), que cada día me venía a ver y sus ánimos, palabras, son parte de lo que te hacen seguir con tu recuperación “POCO A POCO”…
ResponderEliminarSupongo que cuando hablas de pesas te refieres al compás de tracción, Chelo. Cada vez se ve menos, en tu época era muy habitual. Había más tendencia a tratar al paciente mediante tratamiento conservador más que con intervención quirúrgica.
ResponderEliminarEra admirable ver cómo los pacientes podían estar con esa tracción, con las pesas tirando con fuerza, durante seis semanas. Es normal que a tí no se te haya olvidado. Parece que te estoy viendo como si no hubiera pasado el tiempo y admiro cómo pudiste adaptarte. Tu recompensa fue el resultado del buen pronóstico de tú lesión.
Si que es un shock tremendo para el paciente y su familia y dura la confrontación con la silla de ruedas de tus compañeras que te anunciaba que, en breve, tú estarías en esa fase.