El próximo martes día 18 de Junio se va a estrenar. al fin el Documental : "El vuelo de Elisabeth"un documental sobre los tres últimos años de la vida de Elisabeth Heilmeyer, Presidenta de la Asociación www.sillasvoladoras.com Sillas Voladoras
El Proyecto :
Dicen las productoras : El puzzle vital de Elisabeth se vino abajo el dia del accidente y hoy todavía sigue recogiendo las piezas de su vida en un intento incansable por encontrar la felicidad.
La búsqueda de la felicidad
Para Elisabeth, ser feliz es aceptar su cuerpo, comprobar sus límites no agotarse en la lucha cotidiana y, sobre todo, VOLAR
Martes 18 de junio, en el CC Blas de Otero de San Sebastián de los Reyes
Estreno del corto documental El vuelo de Elisabeth
Elisabeth Heilmeyer es la primera persona con discapacidad que ha recibido la licencia de vuelo sin motor en nuestro país, un hecho del que parte este corto para contar cómo consiguió reconstruir su puzzle vital.
María Larraondo Palacios y Laura Martín Mora conocieron a Elisabeth Helimeyer hace tres años y decidieron que tenían que contar su historia. Así nace este proyecto documental independiente y personal, que ha salido adelante gracias al empeño de estas realizadoras cuya intención es bucear en el día a día de una persona con lesión medular.
En este documental es la propia protagonista, Elisabeth, quien narra su historia a través de las conversaciones mantenidas con ella en torno a temas como el momento del accidente, los cambios más inmediatos, las limitaciones físicas y fisiológicas, el sexo, la autoestima...
Además conoceremos una parte muy importante para ella como es el vuelo sin motor, la causa de su accidente y al mismo tiempo el motivo que la mantiene viva.
¿Quién es Elisabeth Heilmeyer?
Esta mujer de origen alemán, que lleva 35 años viviendo en España, se ha convertido en la primera persona discapacitada en recibir la licencia para vuelo sin motor en nuestro país, después de siete años de intensa lucha.
Elizabeth comenzó su particular "batalla de los cielos" el mismo día en que sufrió, el 31 de mayo de 2003, un accidente practicando, precisamente, su mayor pasión: vuelo sin motor.
En aquel accidente, Heilmeyer quedó parapléjica cuando falló el mecanismo que impulsaba el aparato, hoy sustituido por el remolque desde avionetas. En cuanto pudo recuperarse del shock, Heilmeyer inició su peregrinaje por los despachos de Aviación Civil para recuperar la licencia de vuelo que perdió a raíz del accidente y que al final obtuvo por la única vía que la quedaba: la judicial.
Hoy preside la Asociación “Sillas voladoras” que pretende hacer accesible el vuelo sin motor a personas con discapacidad motora y alienta a otras personas como ella a luchar por obtener la misma licencia que a ella le devolvió “las alas”.
Contacto para prensa:
Tlf. 609 02 62 87
Laura Martín Mora
produccioneslamar@gmail.com
Cifrar la felicidad en un sólo objetivo es cuando menos peligroso, más bien creo conveniente trazarse una línea de conducta, diversificando las aspiraciones y aprendiendo a renunciar a las que resulten fallidas. En cualquier caso cada uno tiene la facultad de organizar su vida.
ResponderEliminarLo que sí considero realmente importante es tener siempre alguna ilusión y alguna esperanza.
El sueño de volar... ¿quién no lo ha tenido alguna vez? Creo que, en realidad se busca la libertad...
ResponderEliminarEstoy con Felipe, no se puede vivir con un único objetivo, en la VIDA hay que marcarse diversos objetivos, nuestras metas, aunque sean pequeñas... serán metas, quizás las pequeñas metas nos lleven a la gran META, nunca se sabe. Ya lo dice el eslogan del hospital "POCO A POCO"
¿Cuál es nuestro objetivo? ¿nuestra meta? Pensemos...
Besos y cazuelitas de achuchones...
Es verdad que no se debe de apostar a una sola carta, Felipe, pero es que el sueño de Elisabeth era seguir volando. Ella disfruta de la vida y de su familia a la que ve varias veces al año tomando una avión hacia Munich. El caso es volar.
ResponderEliminarElisabeth se ha caracterizado or su constancia y tesón lo que le hace alcanzar sus sueños. Espero que la suerte le siga acompañando siempre y no tenga que afrontar adversidades como la que le tocó afrontar. ¡Quién le iba a decir que iba a seguir disfrutando de la vida después de sufrir el accidente que la dejó parapléjica!
Antes de trabajar en el Hospital de Parapléjicos, siempre decía que no me quería morir sin haber montado en un helicóptero. Ahora ya no se me ocurre mencionarlo no vaya a ser que me monte para llegar al Hospital a la Uvi y con una lesión medular.
ResponderEliminarCon el tiempo mis prioridades e ilusiones fueron cambiando. Disfruto sin necesidad de estar muy alto ni hacer nada extraordinario.
Me entusiasma este proyecto!!! A parte de estar relacionado con mi campo, me gusta la lucha de esta chica por su objetivo. Olé!!! Voy a seguir su ejemplo y luchar por lo que he dedicado a estudiar y perfeccionar estos últimos 6 años.
ResponderEliminarTu prometes también, Virginia, como Elisabeth. Tú, además, le llevas ventaja pues ella contrajo la lesión con cincuenta años.
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