sábado, 5 de abril de 2014

"La fuerza de un sueño"


Teresa Perales : "La fuerza de un sueño"


Últimamente no dejamos de hablar de fuerza y lucha. Hace poco hicimos alusión al Hospital Nacional de Parapléjicos como "El Hospital de los luchadores" y recientemente hablé de la presentación del Libro de Rafaela Santos : "Levantarse y luchar".

Hoy dedico esta Entrada a otra gran soñadora y luchadora, Teresa Perales, atleta paraolímpica, que acaba de publicar su primer libro : "La fuerza de un sueño".Creo que merece oir en voz propia cómo llegó a alcanzar el suyo http://www.teresaperales.es/blog/

Teresa Perales también habla del concepto tiempo del que hablamos ayer cuando dice : "No debemos de enfocarnos en el problema, sino que debemos de buscar soluciones y NO PERDER EL TIEMPO"

Me ha gustado mucho la filosofía subyacente y el mensaje que transmite :


"Tú eres quien toma las decisiones para ser feliz"

En su discurso hace alusión a nuevos conceptos que pueden enriquecernos a los que dedicaré alguna Entrada en el blog como son :

"Engordar de felicidad".

Asimismo, habla del valor de las caricias y de los "roces".

Ya he hecho alusión en el blog al valor de los sueños. ¿Qué sería de nosotros si no soñáramos?; ¿Qué sería de nosotros si no nos levantáramos?: ¿Qué sería de nosotros si no lucháramos?





4 comentarios:

  1. Ayer, en una excursión a Sa Calobra, en un coche de alquiler, en una cuesta arriba en la que el coche tenía que ir en segunda, me encontré, llegando al Coll dels Reis, con un señor que pilotaba un handbike. Un poco más tarde, cuando me faltaba pococo más de un kilómetro para llegar a la cala de Sa Calobra, y mientras estaba parado para fotografiar el paisaje, pasó, cuesta abajo y compitiendo en velocidad con dos ciclistas, el arriesgado piloto del handbike. Aún no me puedo creer la velocidad y la maestría con la que se desenvolvía.
    En mi estancia en Toledo tuve ocasión de ver una demostración de este tipo de máquinas pero imaginé que era para usarlas en zonas llanas y no para manejarlas en unas carreteras que inspiran cierto temor hasta a conductores avezados.
    Al volver al hotel volví a leer la entrada del blog y caí en que la fuerza del conductor del handbike residía en su sueño.
    Un abrazo para los soñadores valientes.

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  2. Una frase: «La fuerza de un sueño. Una idea puede cambiar tu vida».

    Un párrafo (No es mío): «El éxito no sólo se basa en las buenas ideas y en las oportunidades sino, en su mayor medida, es el duro trabajo del día a día, en la observación, en la maduración de las mismas y en el desparpajo e ilusión de una puesta en marcha; así pues seamos honestos con nosotros mismos y decidamos qué, quiénes y cómo queremos ser. En definitiva: abracemos y busquemos nuestro futuro. Los sueños, sueños son, pero pueden estar a nuestro alcance».

    Yo tuve una idea y la convertí en un sueño. Decidí ir a por él y, en ello estoy, disfrutando del objetivo y del camino, la meta es cada paso, cada día. Siempre pensé que sería imposible pero decidí lanzarme y disfrutar aprendiendo y eso hago. Todo el mundo a mi alrededor se sorprende, podrían haber pensado en cualquiera antes que en mi para dedicarse a la tarea y sin embargo ahí estoy. Feliz. ¡Ánimo a por ello!

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  3. Creo, Felipe. que las handbikes han "devuelto la alegría" a muchos lesionados, especialmente a los deportistas y arriesgados como el que comentas. Hace 20 años la vida de un l.m estaba mucho más limitada.

    está bien que avancemos y contribuyamos a que el l.m. como cualquiera pueda alcanzar sus sueños.


    Hace años hubiera sido impensable ver a un lesionado no sólo echando carreras en handbike sino en la calle porque muchos quedaban en sus casas para no exponerse a las miradas de los demás.

    Disfruta y no dejes de soñar.

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  4. Es verdad, Betty, lo importante es crear, imaginar la idea, perseguir el sueño. Encuentro muchas personas sin iniciativa, sin ilusiones, sin "norte". No hace falta que hayan contraído una lesión medular.

    No hay que tener prisa, sino disfrutar del amino, dí que sí. me alegra que estés en ello.

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