Es importante hacer primero lo primero y después de ello, ocuparse de lo demás
Cada cosa a su tiempo
No darse prisa ni poner todo en cualquier lugar de manera ansiosa y descuidada
Supongo que no soy la única que acabé las vacaciones reglamentarias anuales (quien tiene la fortuna de tener empleo estable) y que está metida de lleno en el trabajo cotidiano y en la rutina familiar independientemente de la edad de cada cual.
Me permito advertiros sobre la importancia de no cargar la agenda enseguida y proponernos ese enfoque lento "slow" del que ya hablé aquí en otras ocasiones.http://afrontandolesionmedular.blogspot.com.es/2012/01/feliz-2012-slow.html
Este cuento que hoy nos trae Jorge Bucay https://www.youtube.com/watch?v=SlvovXujnG4 creo que está en esa línea y nos enseña que hay que establecer prioridades. El slogan del Hospital Nacional de Parapléjicos "poco a poco" también tiene aquí cabida.
Para no perder el rumbo
Priorizar lo importante sobre lo accesorio
Ser pacientes en estas demandas
Privilegiar las grandes cosas sobre las menudencias
Ningún orden es definitivo o inalterable
Mi lista depende siempre del momento de mi vida en el cual la hago
No tiene por qué mi orden coincidir con el de todos
El cuento de hoy, como todo lo de Jorge Bucay, es sorprendente pero lo difícil es determinar lo que es importante y lo que es accesorio para cada persona. He visto a algún enfermo muy grave preocuparse por su estética mas que por su enfermedad, tal vez por falta de perspectiva de lo que realmente le ocurría.
ResponderEliminarBienaventurado quien tiene la clarividencia de discernir entre lo conveniente y lo accesorio.
Para unos lo importante es llevar razón, para otros ser justos, para unos terceros quedar bien ante los demás.......,, una vez más la libertadad de cada persona condicionará su actuación, sin importar lo que puedan pensar los que le ven actuar.
Al final creo que no existe mejor criterio que actuar de forma acorde con nuestra de pensar pues sólo tenemos que estar de acuerdo con nuestras normas de conciencia para no acabar reprochándonos a nosotros mismos. Día a día.
Observo, Felipe, que los años te han convertido en un buen filósofo y tienes más de filósofo que de ingeniero. La verdad es que como nos conocemos hace pocos años, no se si siempre existió esta faceta en ti.
ResponderEliminarPor experiencia sabrás que la lesión medular enseña a discernir entre lo verdaderamente importante de lo superfluo. Creo que todos pasáis por una transformación de valores y nos enseñáis a darnos cuenta a nosotros de forma gratuita : un lujo de enseñanza, un aprendizaje que no se obtendría ni con todo el oro del mundo.
Gracias por tu seguimiento y por tus razonadas y bienpensadas respuestas.