Desmontando mitos

Hace ya unos cuantos años que una Psicóloga que estaba haciendo en aquel momento su rotación de Postgrado con nosotros, Rosa María González Díaz, nos dejó esta colaboración que he querido recuperar.

"Desmontando mitos"

El Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo contribuye a desmontar falsos estereotipos y mitos sobre las personas con diversidad funcional. Este ha sido uno de los aprendizajes adquiridos, entre otros muchos, en mi rotación por el Hospital.

En la esfera psicológica, la lesión medular obliga al paciente a reconstruir su identidad personal, comenzando por la identificación con un cuerpo sobre el que, en mayor o menor medida, ha perdido el control voluntario, asumiendo la pérdida de cierta autonomía que le obliga ahora a pedir ayuda para muchas tareas cotidianas...en una sociedad, como la nuestra, que proclama como valores fundamentales el individualismo y una autoeficacia mal entendida.

Cada paciente tiene su propio proceso de adaptación a la lesión medular y las dificultades para la adaptación no tienen por qué correlacionar con la gravedad de la lesión. Así, pacientes con lesiones cervicales pueden adaptarse más exitosamente que otros pacientes con lesiones medulares menos graves.

La edad es un factor pronóstico de adaptación. Así, los niños y jóvenes suelen adaptarse mejor que los lesionados de edad avanzada.

La lesión medular no conlleva, necesariamente, un trastorno psicopatológico. La depresión o ansiedad no son consecuencias necesarias de la lesión.

La personalidad y la adaptación funcional previa del paciente son elementos diferenciales claves en el proceso de recuperación.

El apoyo social y familiar percibidos son fundamentales para el proceso de rehabilitación del paciente.

En el afrontamiento de una pérdida de la magnitud de la lesión medular, aparecen otros conceptos relacionados con la adaptación del individuo a un evento traumático y que proceden de la Psicología Positiva : Resiliencia y Crecimiento postraumático.

Quisiera terminar con un par de citas. La primera de una paciente del centro que he tenido la suerte conocer y que me ha dado una lección de vida: 

“Bajo este mar lleno de ira, lágrimas y desconsuelo, tengo la esperanza que se va a convertir en un océano lleno de veleros de colores, cargados de alegrías, sonrisas y apuestas para seguir alcanzando mis sueños”.

La segunda del poeta Mario Benedetti: ·

"No te rindas, por favor, no cedas, aunque el río queme, aunque el miedo muerda, aunque el sol se esconda y se calle el viento, aún hay fuego en tu alma, aún hay vida en tus sueños. Porque la vida es tuya y tuyo también el deseo. Porque cada día es un comienzo muevo, porque esta es la hora y el mejor momento”.