jueves, 26 de febrero de 2015

Los "andantes" y sus incontinencias : Sexualidad, afectividad y más

Me comentaban una mujer lesionada medular acerca de la dificultad para acceder a tener una relación de pareja dado que, cito textualmente " hay pocos hombres de corazón generoso que quieran estar con una persona que se hace pis y cacas encima". Esta frase y su actitud de tirar la toalla me inspiró esta Entrada porque creo que debía de ser no sólo contestada por mí sino compartida por todos los seguidores de este blog y contestada colectivamente.

Como pueden imaginar, yo ya le he respondido y le he lanzado esta pregunta : "¿Acaso los "andantes" no tenemos alguna incontinencia"? Digo incontinencia y me quedo corta pues seguro que, además, tenemos alguna inconveniencia. ¿Acaso por el hecho de andar ya somos perfectos, guapos, inteligentes, generosos, bondadosos, etc, etc?

La incontinencia es algo que no se ve a primera vista ni en los lesionados medulares ni en los andantes. Hay un porcentaje alto de mujeres multíparas que a partir de una determinada edad presentan problemas de incontinencia y la gente no huye de ellas como si tuvieran la peste.

Hay personas con una incontinencia verbal que no hay quien conviva a su lado y, sin embargo, tienen pareja, hijos, familia y compañeros de trabajo que los soportan estoicamente.

Los lesionados medulares, consiguen, unos mejor que otros, reeducar sus vejigas e intestinos para poder llevar una vida lo más normalizada e integradora posible.

Cuando se inicia una relación, uno no va aireando sus puntos débiles sino que procura mostrar no sólo su belleza exterior sino también la belleza interior.

La muestra del desfile de moda de Nueva York que hace unos días nos acercaba Infomédula


y el acertado calendario de la Asociación de mujeres italianas "angeli senza alli"  http://www.angelisenzaalionlus.it/smistamento.asp?parametro_pagina=La%20nostra%20storianos enseña una vez más que "más vale una imagen que mil palabras"

10 comentarios:

Unknown dijo...

Me ha gustado mucho esta entrada, sobre todo cuando dice que hay personas con incontinencia verbal que tiene pareja, familia e hijos, jejeje totalmente cierto, solo hay que ver las sesiones plenarias del Parlamento y hacerse una idea. Mi chico, casi 5 años mas joven que yo con 29 añitos y apenas llevabamos un año saliendo cuando empece con la enfermedad, me lavaba y me cuidaba como si llevaramos 20 años, aun hoy día siendo "caminanta" de 3 patas, sigue lavandome cuando vamos a algun lugar que no esta adapatado, me trae las compresas y tampax cuando lo necesito y no me averguenzo por ello, ni el tampoco, de hecho cuando el sale del baño soy yo la que le pone mala cara y gasta alguna broma en un andaluz cerrao del tipo "estas podrío", jejejeje. Bss Belisa

Afrontando la lesión medular dijo...

No esperaba menos de tí, Belisa. Tu llamas al pan, pan y al vino, vino ¡eres tan clara! deberías de editar un librito de aquella serie "A lo claro" : "La lesión medular a lo claro". Gracias por tu sinceridad y cercanía y os felicito por esta fantástica "normalización".

Betty dijo...

Andantes y no andantes, con incontinencia o sin ella. Casi nadie se libra de ver «el culo» a su pareja. En los momentos buenos y divertidos está claro y, ¿qué hacemos en los momentos menos amables?. Antes o después, casi todos sufrimos intervenciones y necesitamos ayuda. Las que somos madres hemos sufrido puntos y demás asuntos «sufridos en silencio» je je y a menudo hemos necesitado que nos echaran un ojo. Sobre todo cuando las cosas se complican y los puntos se infectan. En cuanto a los olores, Belisa tiene toda la razón de los olores y otras cosas de la convivencia tampoco se libra nadie.
!Fuera el miedo! Se puede estar guapísimo sentado en una silla. Se puede y se está. En serio, creo que se está haciendo un gran trabajo y la silla se ve como algo mucho más normal de lo que se podía pensar antes. No es un problema insalvable para la mayoría, solo para los excesivamente cobardes y esos no suelen disfrutar de la vida.
Millones de besos.

Afrontando la lesión medular dijo...

El modelo de silla también hace mucho . Ayer me visitaba un veterano lesionado que acaba de cambiar de silla. Ha sido cambiar de silla y cambiar por completo su imagen. La silla ligera y pequeña (su nivel de lesión lo permite) deja más ver su cuerpo, su persona y permite reparar más en el que en la silla. Desde luego, quien pueda que compre un silla ligera y bonita.

Es cierto, Betty, que seguimos trabajando en esta aceptación de la silla, en este "quitar la silla de la cabeza y ponerla en el culo" y en este dar menos importancia a algunos aspectos que pongan en riesgo la autoestima de los lesionados.

Gracias igual que a Belisa por ese saber llamar a las cosas por su nombre con naturalidad y " a lo claro".

La Chica del Jardín dijo...

Andantes o no,¿qué importa?
Yo no me asusto de ver el "culo de nadie y menos de Manuel, ¿que hay que ayudarle? pues se le ayuda, como él si tuviera que ayudarme a mi.

Prefiero un "sillero" con la cabeza amueblada que cualquier "andante" con la cabeza vacía...

Aprendamos a tomar con naturalidad las cosas que nos vienen en la VIDA, hoy en día hay muchos medios para sobrellevar con mayor facilidad las incontinencias (para la verbal o mental... no veo la solución). ¿Acaso nadie ha tenido una urgencia que he hecho que se manche los pantalones? Tenemos la mala costumbre de aguantar al límite de nuestras posibilidades urinarias, y de pronto... Los lesionados van educando su vejiga y su intestino, y supongo que en algún momento lleguen a la casi normalidad y sean capaces de retener...

La realidad es que hasta que no tenemos un lesionado cerca, no tenemos ni la más remota idea de las secuelas que ello acarrea, la inmensa mayoría de los mortales (sin contacto con lesionados) solo ve la silla y unas piernas inmóviles en el mejor de los casos, ¿alguien se ha preguntado alguna vez lo que conlleva la lesión antes de tenerla cerca? La gente solo pregunta ¿podrá volver a caminar? como si eso fuera lo más importante de la historia, Manuel es capaz de ponerse de pié y volverá a dar pequeños pasos con mucho esfuerzo, pero la gente (familia incluida) cree que por ponerse de pie todo está arreglado pues ya ANDA ¿Por qué no quieren enterarse de la realidad? ir sentado o de pie no hace que seamos más ni menos, ni mejores ni peores, ni... simplemente es la posición habitual que lleva una ser humano, pero... ¿qué más hay tras una lesión medular? Nadie quiere enterarse ni entender ¿por qué?

Seamos capaces de centrarnos en lo verdaderamente importante y dejemos a un lado las nimiedades, las personas son lo que son no por su movilidad, incontinencia... Somos lo que tenemos en nuestra cabeza y nuestro corazón...

Beso de una andante... que a veces no puede ni andar...

Anónimo dijo...

A mí me parece que el tema de la incontinencia es uno de los más duros a nivel pareja, sobre todo al principio. Nadie te prepara para eso, yo lo he vivido y las primeras veces era una tortura para los dos, él lo pasaba fatal y yo también. Afortunadamente ahora es distinto y ya no me necesita para eso, sólo si está enfermo puede ocurrir un accidente pero no es parte de nuestra vida diaria.

Lo que sí es cierto es que para empezar una nueva relación tiene que ser complicadísimo. Una cosa es una persona a la que quieres, con la que tienes confianza, que lo haces, te resultará más o menos desagradable pero lo haces porque lo quieres. Pero encontrarte en esa tesitura cuando empiezas a conocer a alguien debe ser un baño de realidad muy duro para los dos.

Afrontando la lesión medular dijo...

Siempre con ese entusiasmo y naturalidad que te caracteriza, Carmen. Quizá,en tu caso y en el de la Anónima seguidora sea más fácil que cuando se trata de una relación que empieza.

Gracias por tu abierto y sincero comentario.

Afrontando la lesión medular dijo...

Es cierto que lo que más cuesta asumir es la incontinencia y que ésta se torna más difícil en los casos de aquéllas parejas que empiezan.

Lo importante es tratarlo con la mayor naturalidad y sinceridad posible. La puerta de entrada a la relación debe ser otra y el tipo de relaciones que se van dar más después de una lesión medular es el de relaciones más estables y con alto grado de compromiso. Se acabó el "aquí te pillo, aquí te mato".

Gracias por su comentario.

Ana dijo...

A ver si me echáis una mano. Se trata de una relación reciente, el lesionado es él. En general todo va bien, pero este tema resulta todavía un poco violento. No se trata de reparos o ascos por mi parte, yo no he tenido que hacer nada y creo que si tuviera que hacerlo, podría sin mayor problema, pero en las dos ocasiones en las que ha habido un accidente, la última la semana pasada, creo que no lo he sabido gestionar bien. No sé si me explico, él lo solucionó ambas veces y yo opté por no hacer ningún comentario porque me pareció lo mejor, pero después, especialmente esta segunda vez en la que fue algo más aparatoso, lo he notado un poco apagado y me pregunto si habría sido oportuno decir algo o mostrar interés en vez de hacer como si nada. Es algo tan personal y tan privado que todo me suena mal, tengo la sensación de que estaría invadiendo un terreno muy íntimo si saco el tema, pero también me pregunto si con mi silencio le estaré enviando un mensaje equivocado. Lo que quiero que sepa es que lo acepto y que no me importa, pero no sé cómo decirlo sin sonar condescendiente. Es mejor esperar a que lo diga él, estaré removiendo algo doloroso si saco el tema, si volviera a suceder, es preferible ofrecerle mi ayuda??? Tengo interés en esta relación, quiero hacerlo bien

Afrontando la lesión medular dijo...

Bienvenida Ana. Igual que lo has comentado aquí, lo debes de comentar con él. Supongo que es una relación de poco tiempo en la que la confianza se debe de ir gestando. Tal vez su reacción no hay sido por la postura que tu adaptaste sino porque el mismo sienta frustración por el "accidente" surgido.

Lo que no se debe de hacer es evitar el tema sino abordar las cosas con naturalidad y comunicarse. El éxito de toda relación está en la comunicación.