Más allá de la adversidad : un hombre resiliente que no ha perdido su sonrisa

Agustín Moya con la camiseta que le regaló su amiga Carmen Dacal

Agustín Moya es uno de esos "pacientes resilientes" que no dejan de asombrarnos por el modo en que afrontan las pérdidas en la vida.

Hace unos días lo vi en el gimnasio mientras estaba en el standing y lo primero que me llamó la atención fue su camiseta de Supermán.

Aunque he encabezado la entrada con la otra foto, esta foto encaja mejor en su persona ya que "Agus", como así lo llaman familiarmente, es un hombre sencillo, poco amigo de protagonismos y le gusta pasar más bien desapercibido.

El modo en el que su familia y amigos se están volcando con él, da una idea de lo que debió de sembrar a lo largo de su vida. Ahora está recogiendo la cosecha.

"Amigos para siempre"

Desde que inició las salidas de fin de semana lo vemos tan contento e ilusionado como se aprecia en las fotos.

Su mujer, Mónica y sus dos hijos, Javier y Elena, le cargan las pilas y le han demostrado con creces su incondicional apoyo.

Mónica y Agus

Javier y Elena

¡Qué mejor cierre que con este bello poema de Mario Benedetti!

No te rindas

No te rindas, aun estas a tiempo

de alcanzar y comenzar de nuevo,

aceptar tus sombras, enterrar tus miedos,

liberar el lastre, retomar el vuelo.

No te rindas que la vida es eso,

continuar el viaje,

perseguir tus sueños,

destrabar el tiempo,

correr los escombros y destapar el cielo.

No te rindas, por favor no cedas,

aunque el frío queme,

aunque el miedo muerda,

aunque el sol se esconda y se calle el viento,

aun hay fuego en tu alma,

aun hay vida en tus sueños,

porque la vida es tuya y tuyo también el deseo,

porque lo has querido y porque te quiero.

Porque existe el vino y el amor, es cierto,

porque no hay heridas que no cure el tiempo,

abrir las puertas quitar los cerrojos,

abandonar las murallas que te protegieron.

Vivir la vida y aceptar el reto,

recuperar la risa, ensayar el canto,

bajar la guardia y extender las manos,

desplegar las alas e intentar de nuevo,

celebrar la vida y retomar los cielos,

No te rindas por favor no cedas,

aunque el frío queme,

aunque el miedo muerda,

aunque el sol se ponga y se calle el viento,

aun hay fuego en tu alma,

aun hay vida en tus sueños,

porque cada día es un comienzo,

porque esta es la hora y el mejor momento,

porque no estas solo,

porque yo te quiero.