jueves, 4 de abril de 2013

"El Trato : La primera medicina" : Acerca del Trato IV

Infomédula  nº 26
Ayer se podía leer ya online el nº 26 de Infomédula . En este número se dedica un especial al Trato debido a la relevancia que éste tiene durante la hospitalización - rehabilitación.

El Título que da pie a la Entrada es el Título de este especial y es el modo en que muy acertadamente definió el padre de un paciente el Trato : "El Trato, la primera medicina". Este Especial recoge no sólo las colaboraciones que hemos hecho una serie de profesionales, entre los que me encuentro, sino también las de algunos familiares y pacientes.

En este número, asimismo, se incluye la Entrevista a Philippe Pozzo a la que algunos seguidores, me consta, ya habían acedido cuando estaba la Revista en construcción así como a su versión en audio.Ya sabéis que se puede acceder a Infomédula a través elenlace e elblog o pinchando directamente en www.infomedula.org

Aprovecho el tema central del trato para recoger algunas ideas al respecto de Philippe Pozzo. Se habla del trato como si solo fuera algo que debemos de cuidar los profesionales sin pensar que la relación del paciente es una relación en la que siempre está implicado un tercero y que la acitud del paciente es un aspecto también a cuidar.

"Por primera vez me veo confinado a la obligación de ser disciplinado con mi fragilidad, constreñido a una cierta frugalidad, modestia, rigor. Estoy obligado a hacerme cargo de mí mismo, mientras que yo creía que era inoxidable. El sagrado cuerpo se convierte de repente en un maldito cuerpo, que le obliga a uno a una cierta humildad. ESTOY A MERCED DE LOS DEMÁS.

Totalmente paralizado aprendo la paciencia ya que más vale no ser impetuoso cuando se es dependiente. Del sujeto exigente, impaciente, centro de todas mis preocupaciones y del Universo, he pasado a ser paciente, a estar dotado de una cierta pasividad, a ser uno más.

Dependo por completo de los demás y, rápidamente, me doy cuenta de que en vez de sublevarme contra esta posición de debilidad, es mucho más útil aceptar esta dependencia y SER AMABLE, incluso ACOGEDOR y CON INTERÉS POR AQUÉL QUE NOS ASISTE"(Philippe Pozzo).

Aprovecho este tema para animar a los seguidores tanto si son pacientes como familiares a compartir sus experiencias y visión sobre el trato ya sea en el Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo o en sus hospitales de origen y ya sean buenas o malas experiencias.

Dejo dos enlaces de interés sobre dos películas relacionadas conel tema . Una es "WIT : Amar la Vida"http://www.youtube.com/watch?v=RK4z8LeR3pU  y otra es "El Doctor"http://www.youtube.com/watch?v=jlC4fpkY0dg

12 comentarios:

"La chica del jardín" dijo...

El TRATO, tan importante en todos los aspectos de la vida, pero más aún cuando uno está en un hospital.

Desde que llegamos al HNP nos hemos sentido arropados por todos, yo especialmente lo he notado más, ya que Manuel estaba muy malito. Las muestras de cariño y apoyo que he recibido de "MIS ÁNGELES" no se pueden medir en ninguna escala. Creo que este hospital está lleno de "ÁNGELES" vestidos de blanco, verde, azul, naranja... El personal que aquí trabaja es ESPECIAL, en los tres meses y pico que llevamos aquí, aun no he visto una mala cara, nadie que mire a otro lado para decir "Buenos Días", esto no pasa en cualquier otro hospital, donde a veces, alguien con cara de perro te da los peores pronósticos sobre la salud del paciente, sin pensar en que el que está escuchando quiere mucho al paciente, y hacen mucho daño.

¡Cuántas lágrimas habré echado! Aquí me han consolado, en otros sitios...

Gracias a todos los que formáis parte de este GRAN HOSPITAL, un GRACIAS, si en mayúsculas a "MIS ÁNGELES" y a "RUBÉN"

Besos, espero que no cambiéis nunca

Mamisol dijo...

Buenos días. Comparto plenamente la opinión de “La chica del jardín”. Creo que el HNP es un sitio especial. Lleno de buenas personas con trato amable, siempre con una sonrisa…

El TACTO y las BUENAS FORMAS son las que, desde mi punto de vista, rigen ese hospital.

Gracias por el trato hacia los enfermos y los pacientes.

Afrontando la lesión medular dijo...

Creo que, en términos generales, el Hospital obtiene una buena puntuación sobre el tratao aunque siempre hay quein no se ha sentido bien tratado y así lo ha dejado reflejado en otros Foros.

Yo estoy encantada de trabajar en este Hospital y me gustaría que la excelencia fuera la norma y hacia ellos debemos de tender.

Dado el tipo de pacientes ingresados es el lugar, como ya he dicho en mi colaboración, donde más hay que cuidar aspectos relacionados con el trato como son la salvaguarda de la intimidad y el manejo del pudor.

Gracias a tí por lo de "Ángel" vuestro que me toca.

Afrontando la lesión medular dijo...

Ya lo creo que este Hospital es especial, Mamisol. Su paso por él no deja a nadie indiferente ya esté directa o indirectamente afectado por la lesión.

A los profesionales que vienen a formarse les insisto en ello y compruebo que salen con una visión diferente a la que tenían del lesionado medular antes de su rotación.

macgo dijo...

Gratitud. Una de las más hermosas del castellano y posiblemente el sentimiento que más felicidad proporciona al que lo es y a quién la recibe. De mi estancia del hospital ese es el sentimiento que permanece cada día en mi corazón. Recordarás, Mª Ángeles, la conversación que tuvimos antes de Navidades sobre el trato en el hospital y como te dije la importancia que el afecto, la simpatía, la sonrisa, la caricia, la broma,… tenían en la recuperación del lesionado y en las personas que nos han cuidado en estos meses. Nunca podré olvidar la importancia que ese trato ha tenido en el afloramiento de ese “otro M.” Tú lo sabes mejor que nadie.
La satisfacción que tengo es que me vine de allí habiendo agradecido a todo el mundo, trabajaran donde trabajaran, lo que hicieron conmigo y mi mujer durante esos largos casi nueve meses.
Voy a hacer algo que nunca pensé hacer y es rememorar mi paso por las diversas secciones del hospital personalizando de nuevo esa gratitud en alguna de esas personas. De forma consciente voy a dejar a muchas personas sin citar pero eso no significa que ellas no hayan tenido conmigo un trato humano e intachable.
Siempre importantes, mejor dicho fundamentales, pero en mi caso más, dar gracias por tener una mujer como la que tengo: alegre, vital, generosa, valiente,… Tú sabes bien lo que ha representado para mí.
Comenzaré esta película dando las gracias al personal de la UCI personalizadas en mi querida Mª Ángeles Marín, Ángela y Julián, ese celador que en mis momentos de bajón se sentaba conmigo a hablar. Allí tomé contacto con “las fisios de respi” que insuflaron vida en mis maltrechos pulmones y que personalizo en María y Lola a las que podéis conocer en este número de la revista.
Pasando a la planta, la 1ª SE, mi afecto y gratitud eterna a todo el personal que personalizo en mi querida Mª Jesús, Viki, Julio, Carlos y Paloma. Aquí sí que me arrepiento de no escribir todos los nombres.
Gracias a mis fisio y terapeutas, Esther, Rosa y Mª Eugenia. Acabasteis siendo mis amigas y confidentes.
A mi ahora psicóloga virtual que vio y participó en ese proceso de transformación y que ahora nos proporciona este punto de encuentro.
Y mi vena sindicalista y reivindicativa no puede olvidar a esos trabajadores recientemente despedidos como, por ejemplo, Jose, así, sin tilde, el peluquero por el que todo el hospital hemos pasado y que siempre tenía un rato para la conversación. Historia viva de ese hospital. Y Elena, de electroestimulación, persona de dulzura ilimitada.
De los celadores del gimnasio personalizo en Juan, serio pero amable, siempre dispuesto a ayudarte y darte ese toque final para que salieras de allí bien colocado en tu silla cuando no podías hacerlo por tu cuenta.
Pilar y el resto del personal de cafetería, siempre al quite cuando necesitabas ayuda y siempre con una palabra de cariño que hacía que el café supiera más rico.
Y qué decir de Antonio, el capellán del hospital. Él sabe lo que le debo y, como pidió el otro día el Papa Francisco al clero, él ya es un pastor con olor a oveja.
Termino. José Miguel, Arancha y Agus: gracias por ese maravilloso ambiente que creáis cada tarde en el gimnasio. Y termino con las nunca suficiente valoradas ROCÍO, CRISTINA y MARTA. La felicidad que me habéis transmitido en estos meses ha derivado en amistad. Os quiero.

Afrontando la lesión medular dijo...

Ayer me envió un mail un paciente, Juan, al que aprecio mucho y se despedía firmando así . "Un paciente agradecido". Yo creo que tú, Macgo, eres otro paciente carismático que pasa a formar parte de la lista de pacientes gratos y agradecidos a los que es fácil tratar. Decimos, familiarmente hablando,"es un buen paciente". Es recíproca la foma de aproximación. Los que recibís tanto, ya seáis pacientes o familiares, también es porque dáis mucho y, como los niños, empapáis como esponjas absorviendo todo lo que se os pone por delante.

Podía seguir escribiendo sobre el tema pero no quiero que pierdas el protagonismo en tu comentario que lo has bordado y sacará una sonrisa a todos los nombrados. Es muy de agradecer que a uno le agradezcan porque ello contribuye a hacerlos más felices sirviéndole de estímulo para seguir trabajando y, como dije en mi colaboración, para que EL TRATO siga siendo : LA PRIMERA MEDICINA.

Anónimo dijo...

El trato que recibió mi amigo no fue el mejor. Los primeros días le daban de comer y bañaban. Meses después fue un fisiatra y ejercicios limitados porque iban a su casa. A los 8 meses el neurólogo indico el daño de la lesión y lo envío al psicólogo el cual solo le dio a leer un par de libros y vio una película. Solo tuvo 2 sesiones. Luego va una doctora que cambia la sonda llega dice buenos días se pone los guantes la cambia llena su informe y dice hasta luego. Así que sin duda son muy afortunados en estar o a ver pasado por ese hospital. Sin duda es difícil encontrar a profesionales que se interesen de manera integral por su paciente. Mi amigo dice que a nadie, refiriéndose a los médicos, le interesa su bienestar solo hacen su trabajo. Y yo le digo que conozco a Ma. Ángeles quien sin duda es lo contrario a lo que el describe.
Adry

Afrontando la lesión medular dijo...

He conocido pacientes en los que el techo de su programa de rehabilitación fue tan limitado como el de tu amigo, pacientes de México y Venezuela. Es verdad que los nuestros, aunque a ellos siempre les sepa a poco su estancia hospitalaria, son unos privilegiados.

No entiendo como puede no interesarlea a algún "profesional" sus pacientes. Los pacientes son la razón de ser de nuestro trabajo. Espero no perder NUNCA el interés por mis pacientes. Mis pacientes también llegan a ser casi parte de mi familia. No podría trabajar en el Hospital Ncional de Parapléjicos si no creyera en las posibilidades rehabilitadoras-integradoras de los pacientes. Soy una privilegiada por trabajar en él y por lo que el trabajo me aporta no sólo en lo profesional sino en la personal. La mayor recompensa es la gartitud que recibo diariamente en persona o de manera virtual.

Aprovecho para recomendar dos películas relacionadas con el tema (dejaré el enlace en el Post): "El Doctor" (está ya está descatalogada, creo) y "Amar la Vida" A la que ya hice alusión en el blog el pasado año.

Lucía dijo...

Cuando llegué al Hospital, lo que más me asombró fue el trato, ¡¡qué trato!!
No sé si fue "mala suerte" pero veníamos de otro hospital en el que todo eran malas caras, desinterés... Por eso cuando llegamos a Toledo me sorprendió tanto aquel trato, siempre había para mí un saludo, una sonrisa, unas palabras bonitas... Que al fin y al cabo no cuestan nada y ayudan tanto cuando te sientes mal y estás tan lejos de los tuyos...
Yo solo tengo buenas palabras para toda la gente del Hospital; como familiar me trataron magníficamente, como nunca creí que me tratarían personas que no me conocen de nada. Me ayudaron mucho en aquellos momentos tan duros, tanto el personal como las familias y pacientes que había en aquel momento.
Haber convivido allí durante seis meses con tantas personas buenas, me ha servido para aprender mucho y me ha ayudado a ver cosas que antes, o bien no veía, o para mí pasaban desapercibidas.

Acabo de llegar de la misa de aniversario de Martita, que también fue paciente del HNP, y he venido con mucha angustia, porque he estado reviviendo tantas cosas ahora mismo, en tan pocas horas... Cosas buenas y cosas malas...
Muchas veces echo de menos el Hospital por eso, por ese trato, esa comprensión y esa ayuda tan necesaria que, una vez que estás fuera, es tan difícil conseguirla en personas que no han pasado por ello y que nunca han estado "entre ello".

"La chica del jardín" dijo...

Macgo, te entiendo y eso que no soy paciente sino familiar. En estos meses me he dado cuenta de lo importante que es el trato y saber hacer en este Hospital, quizás siendo paciente se ve aún más.

Desde otro punto de vista, el de la docencia, "tenemos mucho en común", nuestros alumnos se convierten en una familia adolescente, en la que influimos más de lo que pensamos y para muchos de ellos somos ejemplos de vida. Yo, a algunos, los más "frikkis" a los que les gusta la Física, los cojo con 14 años y los suelto con 18, la verdad es que algunos nunca desaparecen de mi vida y acabamos siendo amigos de verdad.

Yo trabajo en el cole donde estudié, y puedo decir muy orgullosa que aquellos profesores que me dieron clase, hoy compañeros de fatigas, son muy buenos amigos, a pesar de la diferencia de edad. Me apoyaron cuando entré a trabajar, y ahora, muchos ya jubilados, siguen conmigo. Yo espero que alguno de mis adolescentes siga en el camino de mi propia existencia. Cuatro alumnas del pasado curso vinieron a vernos, a Manuel y a mi, al Hospital, ¡no podéis imaginar el subidón que nos dieron! Manuel no las conocía, pero rápidamente empatizó con ellas. Un lujo, trabajar en un cole que, en realidad es otra familia más, formada por personas de variopintas edades, pero familia. He recibido mensajes de mis "frikkis" que han hecho que los lagrimones cayeran por mi rostro de emoción. Esto también tiene mucho que ver con el TRATO. Los profes vocacionales no tienen nada que ver con los que dan clase porque no encuentran otra cosa, y eso los chavales lo notan y mucho. Yo prefiero saber menos y conocer a mis alumnos y transmitirles lo poco que sé, sabiendo que se enamorarán de la materia como yo lo hice hace ya muchos años.

El TRATO es una EXPERIENCIA de VIDA.

"Si tratas a los demás como te gustaría ser tratado, pocos valores más serían necesarios"

"Los valores son razones del corazón que la razón no entiende"

"El valor de una persona se lo mira en su actitud. Se perseverante en tu forma de mejorar tu trato a las personas"

Con estas frasecillas, me despido por ahora.

Estoy segura de que si tratamos bien a las personas que nos rodean, ellas sabrán cómo tienen que tratarnos.

Gracias una vez más a los "ÁNGELES" del Hospital, sin ellos nuestra estancia sería mucho más dura.

Afrontando la lesión medular dijo...

Belisa, Lucía, si te lee, seguro que se está acordando mucho de Marta. Quédate siempre con lo bueno. Recuerda esa frase que dijo Izaskum Benito, una de las Escritoras del Libro "Afrontando la Lesión Medular" : "De todo lo malo se saca algo bueno".

Si es verdad, Lucía, que todos los familiares que llegan tienden a hablarnos del "mal trato" que recibieron en sus hospitales de origen o de la crudeza con la que fueron informados de la lesión-pronóstico.

Me alegro que la dura experiencia que te tocó vivir se viera compensada por la madurez que adquiriste y el cambio en el modo de ver la vida.

Afrontando la lesión medular dijo...

Creo que la Escuela es otro lugar en el que se puede aplicar toda esta filosofía del trato y de la empatía.

También comparto que siempre debemos de pensar en cómo nos gustaría que se nos tratara a lahora de tratar a alguine.

La película "El Doctor" (he añadido el enlace en el Post esta tarde), trata precisamente de cómo "El Doctor Mc Guill" cambia su enfoque en cuanto al trato al paciente cuando es él el que pasa a ser paciente. Una película, muy, muy recomendable, especialmente para los profesionales, doctores o no.

Hasta ahora todas las opiniones coinciden en el buen trato pero estoy segura que no todo el mundo lo ha vivido del mismo modo. Me gustaría contrastar con otrs visiones para poder cambiar actitudes y corregir errores.

En un correo me decía hoy un paciente que siempre hay alguien que notiene una actitud tan favorable o que no cuida el pudor, p.ej. y un celador me dijo hace un tiempo : "La leche puede ser muy buena, pero si le cae una mosca encima, ya la estropea".