martes, 29 de octubre de 2013

Perseverando

Teresa con su labor terminada . Foto : J.Carlos Monroy

El pasado año dediqué una Entrada (ver "Paso a Paso, hebra a hebra" del 18 de Septiembre de 2012) a Teresa y a la labor que estaba realizando. La llevaba sujeta a un centenario bastidor que apenas ya nadie usa y era tan ambiciosa su labor que hasta el Padre Antonio se metía con ella. Ahora ella lo recordaba en un Comentario que hacía en la Entrada que yo le dediqué tras su fallecimiento.

La labor es un trabajo lleno de puntadas en punto de cruz realizada con amor para una persona muy preciada suya.

Estaba segura que Teresa terminaría su labor por su perseverancia, porque sus años no le han impedido esforzarse en su rehabilitación. No se la oyó decir . "No puedo más y aquí me quedó" sino que hacía lo que estaba pautado y más. tanto a nivel físico como mental. Teresa colaboró con gran espíritu de superación.

Otros lesionados de su generación, educados en el esfuerzo y perseverancia no han podido asimilar, sin embargo, las secuelas que la lesión les dejó y es algo que se repite como una constante en los Grupos de "Mayores" lesionados que dirijo.

Tras el alta, Teresa sufrió una caída en casa que por fortuna no tuvo peores consecuencias.Asiste a piscina y camina con una muleta. Otras secuelas no visibles /vejiga e intestino) no acaban de proporcionarle la tranquilidad y calidad e visa que desearía.

No puedo olvidar que su familia juega también un importante papel en su integración proporcionándole el calor que toda persona necesita para seguir viviendo.

Hoy en su paso por el Hospital para su revisión,Teresa se encintro con la mayoría de los profesionles que la trataron que le dejaron buen sabor de boca y que mencionó con afradecimiento en su pequeña colaboración en el especial sobre "El Trato" de Infomédila (Ver Marzo 2013)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Pues sin duda un gran logro, yo la verdad eso de tejer o bordar, no se me da.

Para mi eso es digno de admiración y resultado de mucho esfuerzo.

Un abrazo.

Adry

Afrontando la lesión medular dijo...

A mí me gustan las manualidades pero eso del punto de cruz me parece admirable también.

Lo que se empieza se debe de acabar. No vale la pena tanto esfuerzo si se deja a medias y se abandona en un cajón.

Es admirable Teresa, es verdad, Adry y más pensando en su edad que ya alcanza los 79.