martes, 29 de abril de 2014

Echar una mano



"Echar una mano" es una expresión figurada que no requiere, necesariamente, la intervención de las manos a pesar de que todos estamos acostumbrados a usar las manos para casi todo y de que nadie piensa que se pueda ayudar "sin manos".esta otra expresión es la que utilizan pacientes y familiares de personas afectadas por lesiones medulares cervicales que comprometen la movilidad de miembros superioes (MMSS).

Esta Entrada me la han sugerido en estos últimos días algunos familiares que han hecho alusión a esta expresión "sin manos" al referirse al gran compromiso de las manos y limitación funcional de su familiar.En las Sesiones Grupales  de pacientes o de Familiares, se suele dar mucho esta comparación. Los familiares de los que "tienen manos" no saben por qué se quejan en comparación con los que están más limitados. Me han llegado hacer una crítica del programa de Informe Semanal del pasado sábado 26 de Abril porque no "mostraba" a los pacientes más limitados.Yo comentaba que muchas veces son estos pacientes los que no quieren aparecer en las cámaras.

El tema lo traigo para llamar la atención sobre algunos aspectos de los que ya hemos venido tratando en el blog  (ver Entrada . "¿Por qué genera lástima la tetraplejia?").

Hoy quiero insistir en la necesidad de hacer sentir al "tetrapléjico "útil y necesario", generador de cuidado, capaz de echar una y mil manos. Me llama la atención que son los familiares los primeros que sindarse cuenta :

- Hablan y opinan por ellos
- Los tratan como niños
- Usan expresiones inadecuadas del tipo "no tiene manos"
- No se dejan orientar o apoyar por ellos

Si al familiar le parece poco válido su familiar afectado por la l.m. y no desarrolla una política inclusiva, no es de extrañar que los "extraños" los miren con lástima y los consideren poco válidos.

Dejemos que esta riqueza de la diversidad nos sorprendan y estimulemos al l.m. a generar cuidado y ayuda,apensar que aún puede echar una mano y ¡quién sabe! tal vez ahora las eche más que antes.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Es interesante esta entrada, en lo personal, muchas muchas veces, quería decidir por mi amigo y lo peor, no respetaba sus decisiones.

Hoy es diferente, claro me costo algunos años entender, pero hoy acepto a mi amigo como es, aunque se que pudiera estar mejor, respeto que no quiera hacer mas de lo que hace, discuto con el porque no tenemos el mismo punto de vista, pero eso enriquece las charlas, porque ahí esta, defendiendo su postura y opinión.

Algunos aspectos que hace su familia, me molestan, pero también lo respeto y trato de no hacer lo mismo.

Debo reconocer que algunas veces, el me decía su punto de vista y yo decía, !tiene razón¡, y la tenia porque ya no camina y ¿como lo iba a contradecir?, pero comprendí que eso no esta bien.

Hoy con el paso de los años, seguimos siendo amigos, la lesión no es un impedimento y yo, como antes de la lesión, sigo sin hacerle caso. :)

Adry

Afrontando la lesión medular dijo...

La vida es un continuo aprendizaje, querida Adry. Todos vamos aprendiendo y modificando posturas que, en otro tiempo, pensábamos que eran las correctas.

¿Quién es quién para decir lo que está bien o mal, para sentar sentencia?. No obstante, tu amigo podría utilizar toda esa cabezonería suya en la búsqueda de otras alternativas que le hagan la vida más feliz y llevadera.