domingo, 15 de abril de 2012

"Itinerarios" : Los primeros comienzos

Una de las cosas que más preocupa al l.m. al alta es la continuidad que va a tener su rehabilitación.

En el Hospital todo está organizado desde que uno se despierta con horarios y programa para cada actividad. Esa rutina es lo que parece dar sentido a sus vidas y sentirse activos, rutina que con el alta se interrumpe.

Pacientes y familiares nos comentan que al llegar a su lugar de residencia, cambian los criterios y razón de ser de la rehabilitación, considerando, en la mayoría de los casos, que la rehabilitación no está indicada porque no se trata ya de un proceso agudo sino de una fase crónica que, generalmente, comporta solo mantenimiento debido a que la lesión ha podido llegar ya al tope de lo esperado.

Sea por el sistema público de salud o sea por mutuas de accidentes de trabajo, los pacientes quieren mantenerse activos para no "oxidarse" y centran su meta en la rehabilitación olvidando, a veces, otras muchas actividades que son necesarias también para alcanzar los mínimos de bienestar o felicidad.

Lo dicho hasta ahora se refiere a la rehabilitación pero hay otros l.m.que inician un peregrinaje por otros hospitales de España, Europa o USA en busca de soluciones con las más variadas técnicas o ensayos clínicos invirtiendo, en ocasiones, grandes sumas de dinero que más les valdría emplear en vivir con holgura y disfrutar de lo que, quizá, previo a la lesión no pudieron.

Otros, sin embargo, adecuan un espacio en casa para hacer de forma autónoma los ejercicios que aprendieron. Se movilizan y, según los casos, se ponen de pie con standings (comprados o fabricados de modo casero), hacen marcha en paralelas, etc.

Tanto el l.m.como su familia lo que no tienen que olvidar es continuar con las pautas o ejercicios que aprendieron en el Hospital. Es suficiente, a veces, con seguir realizando las Actividades de la Vida Diaria (AVD) que aprendieron en Terapia Ocupacional como son : comer, asearse, vestirse o manejar el ordenador hasta el nivel alcanzado o superarlo, si cabe. Es frecuente que tareas aprendidas en nuestro Hospital se abandonen al llegar a casa por comodidad del lesionado o por actitudes sobreprotectoras por parte del familiar perdiendo así el objetivo alcanzado.

4 comentarios:

horacio novello dijo...

Yo, debo reconocer, soy un vago de primera.
Me ayudan dos factores. Primero que en el lugar en donde vivo es provisorio. No tengo espacio para intentar mantener el régimen de rehabilitación que debería. Por otro lado saber que mi lesión es completa y no existe posibilidad de volver a caminar. Ya se, ya se... cualquiera me diría que de todas formas hay que mantenerse y muchos más etcéteras que a un vago del desarrollo físico como yo no llegan a convencerlo.
Pero eso no impide que todas mis cosas las hago yo. Tengo la posibilidad de ser independiente y lo disfruto hasta el límite que pueda.

Afrontando la lesión medular dijo...

Creo que es una buena filosofía de vida la tuya, Horacio. Supongo que influyen, entre otros, los factores que dices : tu tendencia al sedentarismo y el saber que tu lesión es completa.

Creo, no obstante, que no es sólo el saberlo , sino el haberlo aceptado lo que hace que centres tu vida en otras metas y disfrutes de lo que la vida te ofrece cada día. Ya comentaste en otra entrada que tu padre te ayudó a valorar la vida en toda suu extensión y a no dejar para el final de la misma el disfrutar.

Anónimo dijo...

Adrymex:

En el caso de mi amigo, el abandono la rehabilitación, el tiempo que estuvo en el hospital,pues iba un fisiatra (creo que así se llaman) y durante un poco mas de tiempo iba a su casa, pero ahora tiene varios meses que no hace nada. Solo no le interesa. Y pues Terapia Ocupacional, pues no sabe como hacerlo ya que no fue a ningún hospital especialista en este tema, así que ahí esta solo en casa. Ahora espero que encuentre alguna razón para empujarse hacia adelante y lograr tener sus actividades cotidianas.

Afrontando la lesión medular dijo...

Pues es una pena que haya hecho tan poca rehabilitación física y que no haya tenido la oportunidad de hacer Terapia Ocupacional. Nuestros pacientes son afortunados por el abanico de posibilidades que se les ofertan en el Hospital. Me consta que en otros países y más de Latinoamérica (vinieron pacientes de allí, Méjico, Venezuela, pagando su estancia para hacer rehabilitación aquí) la rehabilitación se queda muy corta.

Además, el hecho de pasar por nuestro Hospital y convivir con tantos pacientes "veteranos" ya es terapéutico.