lunes, 14 de mayo de 2012

"No quiero saber" (II) : Esconder la cabeza como el avestruz

Ya abordé en otra entrada ("No quiero saber") como la negación (no querer saber), es un mecanismo de defensa que se pone en marcha al inicio de la lesión tanto por parte de los pacientes como de los familiares. Inicialmente, no supone un problema pero la cosa se complica cuando la negación se prolonga hasta el final del proceso rehabilitador e impide asumir la lesión y sus secuelas, retrasa la adaptación de la vivienda (necesaria en la mayoría de los casos) o los cambios estructurales tras la lesión al tiempo que no se acepta el alta.

Esta reacción, no es algo aislado sino bastante generalizada. Se oyen expresiones del tipo : "Están echando gente" ; "Ya nos echan"; o "Cómo nos van a a echar sin tener la casa preparada".

El proceso rehabilitador es lo suficientemente largo, en la mayoría de los pacientes, que hay tiempo suficiente para poder organizar las cosas bien, sin que a uno le pille desprevenido, antes del alta y favorecer el que ésta se entienda como otra fase de dicho proceso y el puente entre el  Hospital y el hogar.

Hay una tendencia a resistirse al alta ya que en el Hospital está todo adaptado y resuelto (ver entrada "Vivir en una burbuja"). Los miedos y las expectativas irrealistas favorecen esta actitud. Los familiares suelen darse cuenta de esta resistencia un poco tarde y de cómo prolongar la negación no favorece ni al paciente ni al familiar.

Estos días atrás, hablaba con varios familiares que, ahora, tras el alta, algunos y, en las puertas, otros, se arrepentían de no haber enfocado las cosas de otro modo. Aplazaron las obras porque tenían la esperanza de no precisar adaptaciones y de que se recuperarían, finalmente, los pacientes.

Coinciden que éstos son, generalmente, los familiares que no hicieron seguimiento psicológico y que no favorecieron en los pacientes, tampoco, la adherencia al mismo. Se centraron tanto en el gimnasio y la rehabilitación física con la esperanza de andar, que no se preocuparon de buscar "apoyos" y estrategias de afrontamiento abordando la rehabilitación de manera integral.

8 comentarios:

horacio novello dijo...

Hablar, concientizar, informar, explicar, interiorizar y muchos más sinónimos y verbos que hay que aplicar en cualquier terapia de rehabilitación.

Creo que es imprescindible en el HNP de Toledo (ahí estuve yo) que esto se materialice formalmente. No basta la buena voluntad de tu departamento para encauzar la concientización del paciente.

Se confía en una adaptación psicológica natural. Creo que no está bien.

Estoy absolutamente seguro que si un paciente realiza o consigue hacer determinado logro pactado entre el doctor y la fisio lo van a dar de alta. Pero a vos o a cualquiera de tu equipo NO los consultan sobre si hay riesgo de una depresión cuando lleguen a casa.

Afrontando la lesión medular dijo...

Tienes razón, Horacio, no sólo la "culpa" es de los paciente y familiares. Es un proceso complejo la información y es verdad que en él confluyen una serie de factores, entre ellos el de la NEGACIÓN del que hablo.

También, es cierto, que se habla poco con el paciente o si se hace, no se retoma en diferentes momentos para ver cómo va asimilando la información.

Es una de las asignaturas pendientes del Hospital : el crear uan Via Clínica sobre el proceso de Información.

Maika Imedio dijo...

Todo mejoraría si la visión de la diversidad funcional (discapacidad) ofrecida por parte de los profesionales del HNP no formara parte del modelo médico-rehabilitador, según el cual los diversos funcionales somos seres defectuosos a los que la rehabilitación puede convertir en normales, sino de la visión de la diversidad, consistente en contemplar nuestra condición de diversos funcionales como una más entre la diversidad humana. Para más info, http://www.forovidaindependiente.org/el_modelo_de_la_diversidad

Anónimo dijo...

Desde mi punto de vista es normal que los pacientes tengan miedo al momento del alta, es muy probable que tengas que dejar tu antigua vivienda para buscar un nuevo hogar, es en esa busqueda de nuevo hogar donde todo se complica,ya que por el ingreso en una residencia tienes que pagar precios muy elevados, o pagar a alguien que te atienda y te ayude en tu vida diaria (en caso de tetraplejia) buscando tambien una vivienda adaptada, o si los ingresos económicos no permiten ninguna de esas alternativas, tengan que volver a casa de sus padres, independientemente de que tengan o no buena relación o que los padres puedan o no hacerse cargo.
Tienes que emprender una vida diferente a la que tenías, ¿como no tener miedo?

Afrontando la lesión medular dijo...

No sé cuál es exactamente el "modelo médico rehabilitador", porque no todo el colectivo médico entiende la rehabilitación del mismo modo.
Yo, al menos, intento acercar posturas y trasmitir otro enfoque cuando tengo que formar a futuros médicos rehabilitadores y creo que consigo y conseguimos que salgan del H.N.P. con una visión diferente del colectivo de personas con diversidad funcional.

Ojalá que este mensaje pudiera hacerlo llegar a la población en general.

Gracias, de nuevo, por entrar al blog y volcar tus opiniomes que nos permitirán seguir trabajando por favorecer la calidad de vida de las personas con diversidad funcional.

Dejo aquí una referencia bibliográfica que puede ser de interés . "El etnógrafo discapacitado o quíen discapacita al discapacitado" Marta Allué.

Afrontando la lesión medular dijo...

Claro que es "normal" tener miedo. Lo que yo planteo es poder trabajar los miedos (porque los miedos se pueden trabajar, para eso está el apoyo que proporcionamos desde nuestra Unidad de Psicología, al que se le suele conceder poca importancia) durante el ingreso, con el paciente y su familia, para poder afrontar el alta de la mejor manera posible.

Anónimo dijo...

Ese es el problema, la poca importancia que se le da a la psicología, porque para mi es una parte muy importante, de que te sirve ir a rehabilitación si luego no "te ves" en la silla, si no puedes asimilar la lesión y los cambios? es muy importante la ayuda psicología incluso despues del alta, que es cuando verdaderamente el lesionado verá hasta que punto su vida da un giro.
Me sorprendió cuando me enteré de que las citas con la Unidad de psicología no eran obligatorias, ¿porque? si es una parte más de la rehabilitación.

Afrontando la lesión medular dijo...

Pues es así, nos guste o no. Yo lo siento porque a veces es demasiado tarde cuando acuden en busca de apoyo o ayuda y entran en pánico por el alta y quieren aplazar la misma.

Las mejores altas, las que uno desea de verdad aunque, por desgracia, son pocos los pacientes que encontramos en esa situación.

Otro problema es que tampoco los profesionales favorecen la adherencia al seguimiento psicológico. ¿Cuántos creen de verdad en la rehabilitación integral?.