viernes, 10 de mayo de 2013

"Él se fue a las cinco"



La MUERTE, aunque forma parte de un proceso evolutivo y natural por el que todos tenemos que pasar, sigue siendo difícil de aceptar para la mayoría de los humanos.

Me llama la atención el modo en el que un paciente me comunicó hoy el fallecimiento de supadre : "Se fue a las cinco".

Sobre la muerte se ha escrito, se ha hablado mucho y se han hecho muchos Documentales y Películas. Yo misma le dediqué una Entrada hace poco (ver "Vestirse de duelo : Blanco o negro") y en el blog hay dos enlaces que merecen la pena sobre el tema : "El último Viaje" y "Las alas de la Vida".

Destaco, asimismo, algunos libros recomendados como son los de Ramon Bayés : "Psicología del sufrimiento y de la muerte" y "Afrontando la vida y esperando la muerte" y de Carlos Cobo Medina : "Los tópicos de la muerte : La gran negación", "Ars Morendi : Vivir hasta el final" y "El valor de vivir : Elogio y razón del duelo, de cómo el ser humano se defiende del dolor por la muerte de un ser querido".

Estos son unos entre tantos libros dedicados a la muerte. Libros que pretenden aproximarse a la muerte estratégicamente para entenderla mejor.

Dejo aquí dos frases para reflexionar :

"Nada como enfrentarse a la mirada de la muerte para conocer el valos de vivir"

"La muerte solo nos vence si nos amarga la vida"

Recomiendo tres películas :
"Amar la vida"

"Mi vida sin mí" 

 "Quédate a mi lado"

Ya vimos que hay gente que tiende a confeccionar listas sobre cosas que le gustaría hacer antes de morir (ver Entrada : "Vivir mucho o durar mucho"). También hay quien prefiere dejar notas escritas para los que quedan con cosas que en vida sabe que no será capaz de decir o con ordenación de sus últimos deseos o mensajes o felicitaciones para los próximos cumpleaños de los hijos como vemos en el film "Mi vida sin mí".

Asimismo, hay quien deja registradas sus "Últimas Voluntades" también llamadas  "Voluntades Anticipadas", "Testamentos Vitales" o "Instrucciones Previas" que en suma no son ni más ni menos que las directrices al final de la vida, reflejadas en un documento en el Registro de Voluntades Anticipadas que cada Comunidad Autónoma tenga designado (suele haber un Registro por Provincia) , esto es, el modo en que uno quisiera morir si llegara el caso en que no pudiera indicarlo por no estar bien cognitivamente o estar sedado. Son instrucciones dentro del marco de la Ley de Autonomía del Paciente y Derecho a la Información. En Toledo hay dos Registros, uno en la Delegación de Sanidad y otro en el Hospital Nacional de Parapléjicos. EL Documental "Las Alas de la Vida" aborda también este aspecto en un momento, además, en el que aún estábamos muy verdes en el tema de las Voluntades Anticipadas.

Volviendo al paciente que ha perdido a su padre no quiero dejar de comentar su buen afrontamiento y aceptación de la pérdida si tenemos en cuenta que está en una fase de adaptación a sus propias pérdidas derivadas de la lesión. Seguía diciéndome que el ser humano, al final de su vida, suele intuir cuando la muerte llama a su puerta. Me llama la atención que en el mismo día dos personas no relacionadas me han hecho  alusión a ello. El hijo de otro paciente, me comentaba que a pesar de que su padre se encontraba bien física  (antes de la lesión) y cognitivamente y se mantenía activo, había expresado que ya estaba preparado para morir llegado el momento. El hijo achacaba esta postura serena frente al final de la vida a la religiosisdad de su padre.

Hoy me comentaban otros familiares que la muerte del padre de un paciente aconteció a los diecisiete meses de la de la madre, su mujer. Este fenómeno suele ser habitual : Cuando un miembro de la pareja fallece, el otro le acompaña rápido. Es como si el deseo de "estar juntos" de nuevo los llamara. Decía que el padre estaba deseando morirse para reunirse con la madre.

Dejo el enlace a la película de Ingmar Bergman . "El Séptimo Sello"http://www.youtube.com/watch?v=xXe_41qzymg 
"El Séptimo sello", Ingmar Bergman


Dejo el enlace de Betty de "El Canto del loco"cargado de mensaje y colores de arcoiris que tanto nos gustan http://www.youtube.com/watch?v=qQR2IHrr8SE

9 comentarios:

"La chica del jardín" dijo...

La MUERTE... ¿Cuánta gente la teme?

Ayer sin ir más lejos, hablaba sobre ella con un familiar, sobre los curiosos últimos deseos de algunos... Hay quien, estoy segura, sabe cuándo llega el momento y va preparando el terreno, pero, en la mayoría de los casos, creo que no da tiempo.

Aún recuerdo el momento en que murió mi abuela, no estaba enferma, simplemente tenía años, muchos... Cuando le llegó el momento, acabábamos de llegar mi madre y yo, parecía como si nos estuviese esperando para despedirse, ¡Qué fuerte! es la primera persona a la que he visto morir... La sensación de PAZ que se respiraba... no se puede expresar con palabras, fue como si se hubiera cansado de vivir, pero aún le quedaba un último aliento para despedirse. Los sentimientos que me vinieron en ese momento fueron tremendos, pero guardé la compostura hasta romperme en el coche, siempre fui muy mía (ahora saco las emociones fácilmente, he aprendido mucho...). Manuel, que es muy sensitivo y odia estos trances, me dijo al levantarnos: "marcha a ver a la BISA -así la llamaban mis sobrinas- no esperes ni un momento". ¿Había presentido el momento? ¿Algo dentro de él decía que yo debía estar a su lado? No se, pero, cada día que pasa creo que hice lo correcto y fue muy importante para mí estar a su lado en SU ADIÓS

La sensación de PAZ también la sentí el día que murió mi padre, él tenía una expresión de calma absoluta, creo que se cansó de vivir sufriendo y optó por el descanso...

Estos dos momentos, creo que me hicieron ver la MUERTE con más calma, paz, sosiego... No temerla

Nunca he rechazado hablar de la muerte, de cómo deseas acabar tus días... Desde muy pequeña, tengo claro que no quiero ser enterrada, quiero ser incinerada (escribí un papel para mi madre cuando a penas tenía 10 o 12 años). Una vez incinerada, quiero ir al mar, al CABO PEÑAS (Asturias), mezclarme con el agua y que mi energía pase a formar parte del Universo...

Nunca aceptaremos bien el ADIÓS, pero hay que estar preparado y no tener miedo. Somos Energía y pasaremos a ser Energía...Como dijo Einstein "La energía no se crea ni se destruye, solo se transforma"

Besos y abrazos múltiples

"La chica del jardín" dijo...

Por cierto, lo olvidaba, la peli "Quédate a mi lado" es una de las que se ven mil veces y siempre se obtiene algo nuevo, me encantó

Besos y Buenas Noches

Afrontando la lesión medular dijo...

Eres muy generosa al compartir con nosotros tus sentimientos más profundos.

Respecto a tus deseos no se si alguien sabe qué hacer cuando tu mueras o prefieres dejarlo por escrito y de forma legal (he completado el Post con más información respecto a las´"Últimas Voluntades"). Vemos que unas son decisiones más firmes al final de la vida y otras "añoranzas" más ligado a aspectos más trascendentales o sentimentales.

No dejes de ver las otras pelis, te gustarán también. Gracias y APROVECHA Y DISFRUTA DE LA VIDA.

macgo dijo...

Como bien sabes, M. Ángeles, a mí me sido robada muchas veces la experiencia de la muerte y por consiguiente, mis duelos han sido muy descafeinados. En cambio, si sufrí en el hospital la muerte inesperada de mi suegra. Recuerdo que le comenté a Felipe lo duro que había sido perder a la que había sido mi verdadera madre.No lo entendió hasta que le expliqué mi historia de manera resumida. Fue el momento de mayor sufrimiento en el proceso de recuperación de la lesión. Las únicas lágrimas que derramé fueron por ella.
Ahora estamos en la fase de duelo. Por supuesto es muchísimo más duro para Teresa que para mí. Yo aprendí hace mucho tiempo a relativizar la muerte y la acepto como una parte inevitable del proceso vital. También es cierto que debido a mi accidente pude haberla perdido y eso hace que dé más importancia a la vida. Quizás cuando mi proceso de aceptación esté más avanzado mi visión sobre la muerte cambie. Pero también soy consciente de que este tiempo que estoy viviendo es un regalo extra.No sé cuánto durará. Por ello no me preocupa el hecho de que en algún momento termine. Lo que me preocupa es ser merecedor de esre regalo.
Feliz fin semana. Hasta el lunes. Hoy hacemos nuestra primera salida. Ya os contaré

Afrontando la lesión medular dijo...

No siempre se hace duelo por las personas que parecía que fuera razonable que se hiciera. Hay quien lo ha hecho más grande por una mascota integrada como otro miembro familiar que por un familiar que no le representaba mucho.

La persona, como bien dices, que hace las veces de madre/padre, hermano será la que genere el duelo realmente.

El gemelo adoptado en "Brújulas...." fue sentido como el otro hermano o más si cabe.

Hay una película que recomiendo : "El Buen hijo" donde se quiere más al "extraño" que al propio hijo.

Cada duelo es único. El de Teresa, el mayor, sin lugar a dudas. La pérdida de una madre es algo duro.

Me alegro mucho que "emprendáis el vuelo", saborea esta salida, ya sabes, como si no fuera a haber otra, de eso tú sabes más que yo, ¡quién soy yo para darte lecciones!. Tus lecciones de vida son la Mejor Guía que debes llevar contigo en este viaje y en los venideros.

Felipe dijo...

No soy muy creyente, más bien agnóstico, pero cuando vi muerta a mi madre y me costó trabajo reconocerla y llegué a la conclusión que aquello que quedaba allí no era mi madre. Le faltaba el alma.
Me ha llamado la atención el deseo de volver al mar de la chica del jardín. Yo fui el encargado, por expreso deseo de mi hermana, de repartir, por el fondo del mar, las cenizas que quedaron de su incineración. Recuerdo que fue una tarde de verano y que las cenizas, lejos de disolverse se pegaban al fondo, por su enorme densidad, como si se negasen a dispersarse. también recuerdo que sentí un escalofrío y me fui nadando, mientras pensaba que ya se encargaría la próxima. Marejada de dispersar las.

Afrontando la lesión medular dijo...

Yo no he tenido muy buena experiencia con las cenizas de un familiar muy cercano y querido así que si ya me gustaba poco lo de la incineración, ahora menos.

Betty dijo...

La muerte es un gigante de ojos grandes y brillantes. Durante mi infancia, supongo que miraba hacia abajo y no recayó en mi ni en los míos, aunque siempre estuvo demasiado presente en mis miedos. Demasiado consciente de los peligros y de mi fragilidad, cada vez que tenía un viaje, una excursión, cualquier plan… me acechaba el miedo a que ocurriese algo malo. Llegué a pensar que es injusto llegar a este mundo sin que nadie nos pida opinión sobre si queremos o no jugar nuestra partida del juego que es la vida. Supongo que mi cobardía no me hubiera permitido nacer si me hubieran consultado.
Cuando nacieron mis dos primeros hijos, renuncié a viajes por miedo a que pudieran quedarse solos si nos pasaba algo a su padre y a mí.
Hace tiempo que el pensamiento de la muerte me acecha menos. Supongo que empiezo a resignarme, sabiendo que llegará cuando tenga que llegar. Mis deseos de cumpleaños son morir de vieja, de hartazón de vivir después de disfrutar de mis hijos, mis nietos…
Sólo he sufrido la muerte de mis abuelos, y los cuatros murieron a una edad relativamente aceptable. Yo tenía veintiséis cuando murió el primero. Los dos más cercanos y queridos, lo hicieron al poco de nacer mi sobrina y mi hijo, por lo que me convencí de que dejaban generosamente su espacio a los peques y que seguirían vivos de alguna manera a través de ellos.
La temo impertinente, a deshora, llamando a mi puerta o a la de los míos. Me cuesta aceptar, aprender lo que no entiendo, lo que no veo, no siento o no oigo. La muerte es “La nada” de la Historia interminable, significa vacío interior y eso me produce dolor. Espero que cuando tenga que enfrentarme a ese gigante o a cualquier otro pueda ser valiente y haya aprendido algo de vuestra lección de vida y vuestra lucha. De momento, para este trance de pensar en ella, me apropio de unos cuantos abrazos intensos, sinceros y bellos de los que ayer inundamos este acogedor rincón.


http://www.youtube.com/watch?v=qQR2IHrr8SE

Afrontando la lesión medular dijo...

Es verdad, Betty, que la muerte impone. Y la disfrazaba de negro Ingmar Bergman en "El Séptimo Sello". Es por ello que me gustó el modo en que fue tratada en la película "Despedidas" y por eso he puesto esa imagen en el Post revistiéndola de belleza con esa imagen de la niña junto al féretro.

Yo siempre he tenido cerca la muerte y el sufrimiento al llevar veinticuatro años trabajando en el Hospital de Parapléjicos pero no me acostumbro.

Cuando eran mis hijos pequeños, me pasaba como a tí y cada vez que me montaba en el coche temía ser uno de los próximos l.m. Todo te rozaba, los accidentes en piscina, los infartos medulares, las enfermedades neurológicas. Es difíci, a veces, desconectar y vivir sin miedo y sin pensar que "me puede pasar a mí".

Creo que la edad a la que llegue es la que marca la diferencia. Cuando uno es mayor está más preparado, como decía el paciente al que hacía alusión. Supongo que los que son creyentes, entienden la nuerte como un modode encontrase con los seres queridos que partieron antes.

Espero que cuando llame a nuestra puerta estemos preparados para recibirla.

Mil gracias por ese enlace, que dejo colgado en el Post, lleno de mensaje y por esos globos, flores, lápices y un largo etcétera multicolor.