En esta Entrada iré colgando los Cuentos por orden de recepción. Como el pasado año, me gusta avisar que en esta Entrada no se deben de emitir comentarios para no condicionar a los lectores y para que las votaciones no se inclinen a uno u otro lado. Cada cual que lo lea y cuando llegue el momento de votar, haré una Entrada por cuento para ir votando.
Me alegra mucho haber recibido ya tres cuentos. A ver si se anima más gente pues estoy segura que lo haréis muy bien.
Me alegra mucho haber recibido ya tres cuentos. A ver si se anima más gente pues estoy segura que lo haréis muy bien.
CUENTO 1
La
metamorfosis de Kakfa 2
Al extender las manos para lavarlas, miró el reloj: 6,20 AM 17 09 2015. El vaho del agua caliente, borboteando en la pileta, formó un tenue rocío sobre el espejo, ocultando un rostro maduro, facciones regulares, piel todavía tersa, rasurada minuciosamente aún el recoveco del mentón...
Alargó
la mano para entreabrir ligeramente la puerta del baño. Una
corriente fría borró el velo del espejo.
La
imagen, la suya, le golpeó como un ariete... pelo cortísimo
blanco, mirada cansada, rostro cuajado de arrugas, soledad y
decadencia... Se agarró al mueble, las piernas inseguras,
remendadas, el cuerpo cosido con tornillos, incapaz de sostenerse.
¿Fue
suspiro o gemido lo que brotó de sus labios? El vaho volvió
a cubrir tenuemente el espejo.
Con
un dedo nudoso y arrugado como corteza de olmo viejo, escribió
sobre la pátina de vapor: 1ª SE 2005. Y abandonó
con paso inseguro el baño, camino de ninguna parte.
JMA
Ávila 17 de septiembre de 2015
CUENTO 2
¡ Hay iguales !
Aquella
mañana me costaba renquear por la acera, con miedo a tropezar
en alguna baldosa levantada, o meter la puntera del bastón en
la rejilla del albañal y terminar como la otra vez: estampado
contra el escaparate de la tienda del veterinario, montando el
numerito, mientras me daban mercromina
en cada poro. El sol pegaba con ganas. Saqué mis gafas de sol,
estrechas, marrones, y me las puse. Proseguí.
La
madre, al verme aproximar, cogió del brazo a la niña y con
un tono de pena más hondo que mi desdicha le dijo con voz
amortiguada:
-
¡¡ Niñaaa, aparta y deja pasar a este pobre
ciegooo !!
Al
llegar a su altura, solté el debido:
-
¡Hay iguales, señora! ¿Desea Usted un cupón?
Ella
ni se inmutó.
JMA 21 de
septiembre de 2015
CUENTO 3
Tengo un gato políglota
Mi gato Gerik es políglota. ¡Cabalito! No sé cómo ha hecho. Lo compré con dos semanas de vida. Tal vez haya aprendido mirándome por encima del hombro cuando leo... Porque le saludo todos los días: Good morning, Gerik! y responde cumplido: Miau! Y cada noche le deseo felices sueños y lo agradece: ¡Bonne nuit, Gerik! Contesta enternecido: - ¡Miauuuu!.
Habla
idiomas ¡Cáspita ! No me contradigan, que yo sé
de esto...
(Casi)
Todo en la vida emocional es cuestión de actitud.
¡Good
soirée ! (1)
(1) Nota del
editor. Se ha respetado la ortografía alemana del original.
JMA
25 septiembre 2005
CUENTO 4
La premonición
Erase una vez un niño recién nacido que empezó teniendo sueños
que le iban señalando su destino, el bebé lloraba y lloraba, le daban de mamar
creyéndolo hambriento pero él nada de nada, de la teta no chupaba. Cuando pasado
el tiempo comenzó a hablar pudo decir lo que le pasaba, en sus sueños de noche
una pesadilla le atormentaba. Ya de mayor a raíz de una zambullida en una silla
de ruedas se postraba, tenía miedo a crecer y a vivir sentado en una silla.
Pasados los años la pesadilla se hizo realidad pero Joel se dio cuenta que vivir
en silla no es una pesadilla, que la vida puede ser bella aún con sus
limitaciones, con silla o sin silla. Y se dedicó a vivir la vida con otro sueño
que también de pequeño tenía, monitor de equitación de por vida.
Iván Gómez Godoy
CUENTO 5
Siempre de frente
Subí a la azotea. Un hombre se
me había adelantado y estaba sentado, descalzo, con los pies
enfundados en unos calcetines rojos.
—¿No irá a saltar?
—No, de momento.
Bajo la pernera de su pantalón
sobresalía un pijama azul. Me pregunté qué podría haberle
ocurrido para vestirse y encaramarse allí con tanta prisa. Señalé
el poyete.
—¿Puedo?
Se hizo a un lado.
—¿Nunca ha deseado detener el
mundo, que el planeta entero deje de girar, retroceder en el tiempo?
—Con más frecuencia de lo que
quisiera —dijo. El grito de una mujer que pedía auxilio lo
interrumpió. El hombre se puso en pie—. Detener el mundo es
agotador, hágame caso. Luego hay que dejarlo todo en su sitio y,
salvo que sepa volar, es mejor enfrentarse a los problemas de otra
forma.
Se quitó el abrigo dejando a la
vista una capa roja y se marchó volando.
Betty 06 de octubre
de 2015
CUENTO 6
¿Por qué a mí?
CUENTO 6
¿Por qué a mí?
Esa pregunta me atormentaba desde que aquella mañana mis piernas habían dejado de obedecerme. ¿Por qué a mí cuando el mundo está lleno de ladrones, corruptos, asesinos, maltratadores, pederastas, explotadores, violadores e indecentes? ¿No había otro en el mundo que se mereciera ésto más que yo?
Hasta que aquella noche, en el silencio de mi habitación mientras mis compañeros descansaban, la vida, harta de mis quejas y protestas, se me plantó descarnada delante de mí y me dijo:
-Porque eres lo suficientemente fuerte y noble para luchar contra ésto. Pocos como tú son merecedores de participar en esta lucha y disfrutar de la victoria. ¿Me equivoco?
A la mañana siguiente no necesité que nadie empujará mi silla hasta el gimnasio.
Macgo , 10 de Octubre 2015
CUENTO 7
Sin perder rumbo
Por fin llego el día....emocionado lo botó de nuevo....lucía el sol y soplaba una suave brisa...enarboló sus coloridas velas y agarrando el timón le dijo...vamos compañero... El barquito fue tímidamente separándose del muelle...sabía que ya no sería el mismo...volvió a ceñir sus velas...y navegó...navegó muchos días".
Elena Batalla , 11 de octubre 2015
CUENTO 8
El resurgir del ave fénix.
"Una
mañana se despertó temprano y casi con ojos llorosos se levantó,
zarandeando el cuerpo y sus alas.
Su
destino no era claro, pero sus músculos y alas le impulsaban en una
dirección.
Ya
en vuelo, de repente la brisa del viento, empezó a molestar.
Un
empujón lo desequilibró, el miró hacia atrás y tan solo notó en su
cuerpo, que el viento le desplazaba.
Un
ala se paró, el la llamó, la estimuló, pero ni caso. Intentaba
retomar la altura perdida.
No
paró, le echó fuerza, ganas e intención, pero el gran esfuerzo le
dejó exhausto y agotado, la proximidad del suelo cada vez era mayor.
Cerró
los ojos y esperó el final. Tras un tiempo breve notó como todo su
ser era recogido y envuelto, por algo cálido y mullido.
Manuel Penalva, 13 de Octubre 2015
CUENTO 9
No me rendiré
"Fui una niña rubia, pequeñita, tan pequeñita que mis compañeras de colegio, para mi desesperación, me cogían en brazos como si fuese una muñeca.
Después
empezaron realmente mis problemas: Problemas de crecimiento que logré
superar; escoliosis y tratamientos tan terribles como inútiles;
adolescencia con depresión; esfuerzo importante durante la carrera y
comienzos de mi actividad profesional; ilusión; boda; creación de
una familia; nacimiento de mis dos hijos; mielitis; UCI; Toledo;
esperanza; gimnasio; secuelas; miedo; alta hospitalaria; decepción;
ruptura; divorcio; custodia compartida de los niños; dolor
neuropático; vuelta al trabajo; el incierto presente.
Hoy soy
una mujer adulta, con dos niños pequeños, que no piensa rendirse en
la búsqueda de la felicidad."
14 de Octubre
de 2.015 Anónimo
CUENTO 10
- Qué hace ahí?
- De dónde habrá venido?
CUENTO 10
La Chica del Jardín
"En un jardín lleno de vida, surgió la leyenda: una “chica”
misteriosa sentada bajo un bello templete.
Los lugareños se preguntaban
-
Quién será?- Qué hace ahí?
- De dónde habrá venido?
El misterio estaba servido.
Simplemente era una chica a la que le gustaba disfrutar de
aire puro y de la VIDA del jardín, no se planteaba mucho más, aunque en su
interior hervían las emociones del momento, la vida de su amado pendía de un
hilo y simplemente meditaba, hablando con los olivos, las florecillas del campo,
los gorriones…
Llegó el día en que el misterio se aclaró, todos los que
antes se preguntaban por su origen, entendieron su dolor y empatizaron tanto con
ella, que se convirtió en parte de aquel maravilloso jardín, incluso todos la
llamaban “LA CHICA DEL JARDÍN”.
El tiempo pasó, ella seguía allí, pero ya no estaba sola…"
La Chica del Jardín, 14 de Octubre 2015
Vuelvo en cinco minutos
CUENTO 11
Vuelvo en cinco minutos
"Nunca pensé que algo tan sencillo pudiera significar tanto.
Salió de mi habitación y volví a sumergirme. Retomé las
sensaciones de la piscina, con manguitos, flotadores y seguridad que
mantuvieran a flote un cuerpo inerte. Los sentidos restantes eran
capaces de volar más para compensar.
Antes ni había
considerado la posibilidad, pero qué narices era eso de los viajes
extra corpóreos. Mindfullness, Deepack Chopra o setas de colores. Me
acordaba de la plástica música de Dinarama.
Suspendido y
meciéndome, podía oír el suave rumor y oler la sal de este mar
concentrado. Abrí los ojos y la vi en la orilla sonriendo y
agitando la mano como una niña pequeña. Su sonrisa nívea y
pluscuamperfecta no dejaba ver nada más. Voltee y nadé poderoso.
Un beso suyo me
despertó al día siguiente. Todo seguía siendo maravilloso, la luz,
dos taladros pardos, su mente y la mía."
Anónimo. 14 de octubre 2015
"Emilia espera en su silla de ruedas eléctrica a que alguien pase a su lado para recoger el libro que se le ha caído; Ingeniería de Materiales. La biblioteca está vacía.
CUENTO 12
Me
encanta este libro
"Emilia espera en su silla de ruedas eléctrica a que alguien pase a su lado para recoger el libro que se le ha caído; Ingeniería de Materiales. La biblioteca está vacía.
Tras el
accidente, muchos le dijeron a sus 19 años que dejase de estudiar,
que no lograría terminar. Empeñada en salir adelante con su
proyecto de vida, volvió a la Universidad, de dónde mentalmente
nunca se había marchado. Otro reto más.
Javi, compañero
de curso que conocía de vista, entró en la biblioteca, y por su
mirada, entendió que ella necesitaba algo. Se acercó, y tras un
“hola”, se agachó y le dio el libro.
Desde ese día,
inseparables en la carrera y en la vida después.
Su hija Andrea
sonríe mientras cuenta a sus compañeros de estudio cómo se
conocieron sus padres, estudiando esa misma materia, ese mismo libro."
José Luis de Rosario, 14 de Octubre 2015
CUENTO 13
(Había una vez.....) o la frágil frontera entre el cuento y la realidad
"Había una vez...
que a fuerza de ser contada
se repitió tantas veces.
que se volvió realidad."
Juan José Muñoz, 14 de octubre 2015
CUENTO 14
El viejo cazador
 |
| Dibujo realizado en acuarela por el autor : Mariano Rivera |
"Abandonado en una ciudad, tirado en el suelo, moribundo, pena su existencia un perro de caza.
Martín un viejo cazador acompañado de su hija, le lleva diariamente unos mendrugos de pan que le mantienen flaco y débil, pero vivo.
-¿¡Mamá!..... el abuelo conoce a este perro?
-Si hija, al abuelo se le olvida todo menos el dichoso perro.
-No te acerques a él, sería peligroso.
(Tras la desaparición, sentencia el jefe de policía)
-Este es nuestro último recurso, deme una prenda del abuelo, para que el perro siga su rastro.
El perro busca, huele, pegado el hocico al suelo, exhausto, débil, hambriento, no para, no descansa, intuye la perdida, cae al suelo, sabe que está cerca, lo nota en el aire.
A la entrada del supermercado, Martín desorientado, roído su cerebro por el alzheimer, sonríe al ver a su amigo.
Le ha entregado sus últimas fuerzas en la búsqueda"
Mariano Rivera, 15 de Octubre 2015
CUENTO 15
El niño del mechón de pelo
"Hace muchíiiiisimos años en un pueblo pequeño, una casa encalada, una habitación luminosa, en una cama grande.
De nuevo una madre expone su propia vida para traernos otra.
Nacía un niño sano, pero con un mechón rubio en medio de su pelo negro.
En su infancia, algunas personas incultas le decían que llevaba la marca del diablo. Entre los demás niños esto era motivo de burla.
Se reían, incluso le apodaban “El cano”.
Resuelto a terminar con el problema, sorprendentemente, ¡Se tintó el pelo!
Por fin se dijo, todo acabó. Pero al poco tiempo el tinte desaparecía y los demás niños retomaban las burlas con más crueldad.
Siendo ya un adolescente. Aquella amiga que le gustaba, le dijo:
Te queda bien ese mechón, te hace singular, particular, no vulgar. Te hace ………Especial.
Se casaron y fueron felices.
Moraleja
Donde unos buscan tus defectos, otros descubrirán tus virtudes"
Mariano Rivera, 15 de Octubre 2015
CUENTO - POEMA 16
"Árbol de otoño"
"La desnudez de tu cuerpo,
esbelto amor inanimado,
se ha tornado desierto
otoño azul y anaranjado.
Tus brazos a lo alto,
locura de Quijote enamorado,
dejaron de ser nido y hogar
como aquel que perdió su integridad.
Otoño te desgarra la frente,
amarillea tus sienes;
La fragancia de tus formas de otro tiempo
ha venido a pararse en desaliento,
en vacío, en verso de color de fuego muerto...un pensamiento!"
Anónimo, 15 de Octubre 2015
CUENTO 17
CUENTO 17
" El niño que no sabía reír"
 |
| Dibujo realizado por el autor : Rubén Rodriguez |
"Teo era un niño, apocado y tímido. Siempre estaba triste......
Con tan solo ocho años había perdido a sus papás, había viajado de hogar en hogar, sin encontrar
ningún tipo de respuesta a su tristeza.
Su única ilusión era ver desde su ventana cómo las golondrinas hacían sus nidos cada primavera.
Sus ojos, cada vez que salía del colegio, estaban húmedos y cabizbajos porque nadie venía a recogerlo. Siempre se sintió solo.
Su única compañía era su pequeño oso de peluche "yoguy", que le acompañaba cada noche en sus sueños más profundos.
Teo no entendía al mundo ni el mundo correspondía a Teo.
Un día se instaló un circo en frente de su casa y decidió ir! .....fieras, trapecistas, elefantes, pero nada le hacía ilusión.
Salió Pepín ,"el payaso saltarín", vio a Teo , se dirigió hacia el susurrándole al oído...Teo sonrió.
Un vecino exclamó: ¡ Es la primera vez que lo veo sonreír !; ¿Qué le ha dicho?.
Solo le he dicho QUE SU SONRISA NUNCA CAMBIARÁ EL MUNDO, PERO QUE NUNCA DEJE QUE EL MUNDO CAMBIE SU DULCE SONRISA."
Rubén Rodriguez, 17 de Octubre 2015
CUENTO 18
Incertidumbre
"Llevaba
una semana sin llover en la jungla tropical. Jaguares, monos, orugas…
todos estaban desconcertados. Nunca antes habían vivido nada similar
y reinaba un ambiente de pesimismo.
El
perezoso, siempre práctico, decidió consultar con aquel sabio y
anciano tucán que no olvidaría nunca. Él nos daría una respuesta,
estaba seguro.
Con
su lento trazo, marcó en el árbol la señal que sólo los tucanes
entenderían y el gran sabio tardó pocas horas en sobrevolar el
horizonte.
Tras
posarse junto a su amigo, fue conciso: “la falta de experiencia os
impide saber que, cada 30 años, el volcán entra en erupción y eso
retiene a las nubes de la lluvia. No es el fin del mundo. Hay que
saber sobrellevar los malos tiempos. Todo volverá a la calma”.
Así
se acallaron todas las murmuraciones especulativas sobre el desastre
y la vida siguió su curso."
Elena
Vila , 17 de Octubre 2015
CUENTO 19
CUENTO 19
Vocalizando
 |
| Dibujo del autor : Juan María Josa |
"Las ""aas"" (las ""aes"" bien dicho) se
abrían, sus formas y contraformas se henchían, siendo caracteres
cada vez más pesados. Las ""es"" y las ""oes"" (¿podemos decir las ""ees""?), mantenían el tipo.
Las ""íes"" y las ""úes"" no decían ni mu,
eran gentes cerradas e incluso distantes. Las consonantes se perdían
en su puzzle de sinsonidos silbantes, chistosos y renqueantes.
La ""y"", la i griega (ellos le llamaban waw), la ye (en
plural sería el sí inglés), se encontraba desubicada, haciendo poco
honor a su uso conjuntivo afirmativo, dudando entre superyoes, y ella
sin saber si era vocal, consonante o un monigote marginal. Un
garabato con los brazos pidiendo a lo alto una función clara o un
trazo descendente que invade renglones. Tras intensas cavilaciones y
el pasar del tiempo aprendió aquello de la diversidad funcional, y
hoy por hoy se entretiene jugando al yoyó y disfrutando de sus
mágicas capacidades."
Juan
Mª Josa, 18 de Octubre 2015
CUENTO 20
"Había una vez en la calle Larios un marciano a escondidas en un rincón de una tienda. Robó unos pantalones de cuero y una chaqueta de moto y así se camufló de la gente de la calle. Se encontró con un amigo de su planeta y decidieron volver a casa, pero cuando vio que un niño estaba jugando con un juguete como él, se hicieron amigos y aprendió que hasta los humanos pueden hacer amigos con marcianos."
CUENTO 20
El marciano y el niño
Martín Domínguez Vila. 8 años, 19 de Octubre 2015
CUENTO 21
CUENTO 21
El bosque protector
"Brota entre juncales el manantial, dando vida al bosque.
En él, un joven caballero, se oculta de terribles fieras que
le acechan en campo abierto.
Solitario, vive, confinado en la seguridad del bosque
protector, esperando que el futuro, traiga quien le ayude a cruzar el peligroso
páramo que le separa del pueblo.
Se pregunta, ¿habrá algo peor para un
caballero que morir sin honor?
Así, tras años amedrantado, decide luchar, cruzando
valientemente los campos, enfrentándose con monstruos que le atacan, consigue
llegar al pueblo.
Allí, desconcertado, comprueba que ya nadie lo reconoce,
todos lo recordaban joven. Desolado, se arrepiente de haber perdido su juventud
esperando un futuro impreciso.
Repentinamente, despierta confuso y angustiado, ¿Qué has
soñado? Pregunta su madre, llevas relatando toda la noche.
Días después….
Cariño, el chico está desconocido, sale con su silla
diariamente y ya no repite eso de:
“Algún día descubrirán como curarnos la lesión
medular”."
Mariano Rivera, 23 de Octubre 2015
CUENTO 22
CUENTO 22
Madre de mi madre
"No voy a empezar
diciendo, erase una vez una madre. Es una madre, que poco a poco,
como las flores se va marchitando, pero que si le da un rayo de
luz, se vuelve a enderezar.
Una mujer con
unos ojos, que te miran y te piden, no sé qué, que la saques de una
soledad forzada por la falta de recuerdos, sensaciones, en definitiva, de sentimientos que se encuentran atrapados en una cárcel, en una
celda, la cual se abre solo cuando el guardián lo dispone y la
vuelve a cerrar, sumiéndola en un mundo, al que yo no pertenezco,
pero me hace partícipe de él, de sus frases a menudo sin sentido,
de mamá, ¿sabes quién soy?, y responder, eres mi madre.
Es doloroso que
no recuerde mi nombre, pero sabe que soy una persona que la quiere,
que la cuida, que la hace reír, que le pregunta para que esos
recuerdos vuelvan, aunque sea solo por unos momentos, también alguna
riña por no saber aceptar lo que ya olvidó, a fin de cuentas es lo
que hace una madre.
En esta etapa de mi vida, quién me lo iba a decir, hemos cambiado el
rol de madre e hija, ahora ella soy yo"
Mª Del Mar Carracedo, 23 de Octubre 2015
CUENTO 23
La esencia de la vida
"En aquella aldea vivían los seres más alegres que jamás antes
había visto nadie. Seres de colores, parlanchines, bailaores,
gigantones, rechonchos…seres diversos que nunca paraban de reír,
porque para ellos la risa era su energía.
Mangui cuando se despertó vio que todo había cambiado: los caminos
ahora eran grises, los colores de los seres no brillaban y la gente
¡no reía!. Se extrañó tanto que comenzó a preguntar a todos sus
vecinos: a Chato Chatoso, a Lisi Lucy, y por fin la señora Lida le
dio la respuesta. Dos de los seres más alegres de la aldea se habían
enfadado y todos estaban tristes porque no sabían qué hacer.
Mangui no podía permitir que ocurriera eso. ¡Dos amigos habían
dejado de hablarse! Así que con su alegre cantar, llenó de música
toda la aldea. Los dos amigos al escuchar la melodía, se miraron, se
abrazaron y su esencia permaneció inalterable."
C. Gª. Agüera, 25 de octubre 2015
CUENTO 24
"Mongüino y Pingüimon son dos grandes amigos. Allá donde va uno va
el otro. Estudiaron juntos y Pingüimon siempre estaba atento de
Mongüino, que era más perezoso, para que no se quedara dormido en
clase.
Eran la envidia del resto de seres porque siempre estaban riéndose,
compartiendo anécdotas, viajes, juegos que solo entendían ellos y
se tiraban horas y horas hablando de lo que les gustaría hacer en el
futuro.
Un día, Mongüino decidió irse fuera de la aldea a estudiar para
perseguir su sueño: “enseñar los grandes saberes de la vida”.
Pingüimon no podía acompañarle en esta nueva andadura, y tuvieron
que separarse, pero le prometió que aunque estuvieran lejos no
habría un solo día que no hablasen, porque “la distancia solo
es una medida que hace que no veas a la persona, pero el amor hace
que esa distancia sea efímera, rompiendo cualquier barrera que se
pueda interponer”.
C. G. Agüera, 25 de octubre 2015
CUENTO 25
Mientras dure
El amanecer como todos los días se produjo. El sol fue saliendo por
el horizonte y desde la orilla de la playa veía cómo se reflejaba
sobre el mar. Un mar que parecía inmenso, por más que lo miraba
parecía que no tenía fin.
Mi mirada se adentraba más allá, como la marea en la arena. Fui
caminando hasta llegar a la montaña más bonita que había en el
lugar. ¡Era preciosa! Desde allí podía contemplar aquel amanecer,
aquella agua nítida, aquella playa…Me senté, y sin darme apenas
cuenta lo que estaba contemplando era el atardecer,
- ¡Cómo se me había pasado tan rápido el tiempo! - Fue como si aquel paisaje me hipnotizara. En ese momento me prometí vivir, no desperdiciar ni un solo segundo de mi vida, los pequeños detalles, reír más y llorar menos, porque el para siempre no existe y la vida es un “mientras dure”.
C.G. Agüera, 25 de Octubre 2015
CUENTO 26
Vivir sin miedo
- Querida familia, gracias por el magnífico almuerzo, creo que voy a salir a la terraza a echar una pequeña cabezada.
Al salir cerró los ojos y pensó que había tenido una vida plena, vivido aventuras y desventuras, y había engendrado una extensa prole.
Se encontraba en la plenitud de su existencia y guardaba en la memoria solo los recuerdos más hermosos; cuando subía con el perro a las montañas, se bañaba en los ríos de agua helada, corría descalzo sin destino, bailaba hasta la madrugada y revivía la sensación del viento en su cara cuando la moto aceleraba.
También recordaba, cómo despertó de un largo sueño y aprendió a vivir sin miedo, a volar sobre peces de colores entre nubes transparentes, a escalar por arboles de vidrio cubiertos de hojas de papel, a pescar estrellas musicales en el fondo de los mares, abrazar.......las............
- ¡Abuelo despierta!
- ...... si, creo que estaba soñando.
- Vamos a ver cómo se zambullen las ranas en el viejo estanque?
- Vale.
- ¿Te puedo llevar?
- Si, cuidado con las piedras.
- No te preocupes, tú quita los frenos.
Jorge Rosillo, 25 de Octubre 2015
CUENTO 27
Gonzalo Carod, 26 de Octubre 201
CUENTO 28
NOTA : Este año voy igualar la letra de todos los cuentos que enviéis para que se lean con la misma facilidad.
CUENTO 27
Simbiontes
"El mundo es un mar de gente, está lleno
de historias. Así interpretamos lo que nos relaciona con los
corazones de nuestro entorno. Pero qué hacer cuando las señales del
emisor no las puede captar el receptor. O al revés. Qué ocurre con
la atracción entre seres completamente distintos.
Algunos lo llaman conexión,
otros simbiosis, la mayoría locura temporal inexplicable.
Rebusquemos en una cesta. Qué une a simpáticos hipopótamos con los
pequeños pájaros que les acompañan, anémona con payaso o ermitaño
(picarona…). Más, flauta travesera con rock, Wall-e y Eva, Roger
Rabbit con Jessica. Y mi favorita, Campanilla con caracol.
Él
está fascinado por cómo se ilumina todo cuando pasa. La sonrisa que
contagia. La magia que hace con sus habilidades. A ella quizá le
gusta el descaro de su velocidad, la forma extraña en que la mira, o
las historias que puede contar por llevar la biblioteca a cuestas."
CUENTO 28
Entre rosas
Vivían entre rosas, todos afectados de lesión medular. Cada uno de
estos seres, hermosos por dentro y por fuera, tenían un objetivo
común: sanar de su lesión en la cabaña, pero cada uno sentía su
enfermedad de forma un tanto peculiar, unos la afrontaban con dolor
pero con esperanza, otros con dolor y desesperación, algunos también
con dolor pero con cierta alegría vital y pensamientos positivos.
Había otros, niños y niñas, jóvenes y mayores que la afrontaban
como un reto, una carrera hacia el logro final. Todos con
pensamientos, aunque diferentes, habían hecho un pacto final. Este
pacto era, que más tarde o más temprano, con esfuerzo, fe y
esperanza se irían todos a casa con un grato recuerdo.
Un
sentimiento de amor en su corazón. Este sentimiento era que ángeles
de blanco o verde, les habían cuidado con el más exquisito de los
esmeros.
***
Eladio San Juan Brasero, 26 de Octubre 2015
CUENTO 29
La torre del poco a poco
"Este
cuento comienza así:
En la
"Torre del poco a poco", entre todos los enfermos
medulares había dos amigos, Andrés y Luis.
Andrés,
era negativo y protestón. En él la esperanza no existía. No creía
ni en los médicos que se quedaban el aliento en cuidarlo.
Luis, sin
embargo, era positivo, calmoso y lleno de esperanza. Siempre decía
que iba a salir caminando del Hospital.
Andrés,
decía que jamás levantaría el culo de aquella estúpida silla que
olía a resoplido de Mofeta.
-En la
mente está todo, querido amigo, si piensas verás que el pensamiento
positivo te lleva a la energía, y ésta al movimiento, luego el
movimiento es andar y la esperanza el futuro.-le dijo Luis.
Una noche
Andrés soñó y en su sueño, una voz le decía: -Eres un "morral
de leche" si no escuchas a tu amigo.
Meses
después...Andrés anduvo y Luis también."
***
Eladio San Juan
Brasero. 26 de Octubre 2015
CUENTO 30
Ángeles desangelados
En
un lugar de Toledo, está situado el Hospital de Parapléjicos de
España.
Cerca,
el Tajo serpentea camino de Extremadura.
Todo
el edificio es pensamiento, investigación, energía, movimiento y
por supuesto vida.
Los
enfermos, son ángeles desangelados. Los sabios, de blanco o verde,
Ángeles de verdad.
Aquí
se desarrolla la historia que les cuento:
Todas
las noches, en las habitaciones de este Hospital, el viento susurra
en las ventanas. Y con voz de vilolín les dice a los enfermos:
-Niños
y niñas, hombres y mujeres, chavales y chavalas, jóvenes y
ancianos: recordad que en vuestro interior, unida a la esperanza hay
una fuerza superior que, con la medicina, la gimnasia, la terapia y
la psicología, os hará caminar de la mejor forma posible hacia el
futuro y al encuentro del amor y la movilidad.
Y
cuando esteis en la calle no os rindais jamás de los jamases.
***
Eladio San Juan
Brasero 26 de Octubre 2015
CUENTO 31
CUENTO 32
Lorena de Pablo, 28 de octubre 2015
"Su larga melena les tapaba la cara. A ella le molestaba, a él le divertía. Había sido raro alcanzar aquella postura horizontal. Hacía tiempo que se había peleado con las coletas y las gomas del pelo. Hacía tiempo que no le encontraba todo el gustillo a tumbarse en la cama. Sin embargo, allí estaba, rompiendo todos sus esquemas. Aquello contra lo que había estado luchando y contra lo que su mente se había resistido, estaba sucediendo. Dentro de las mil maneras de entenderse que hay, sólo fue una conversación. Sólo y mucho más. Fue perderse y encontrarse. Estamos acostumbrados a vivir con miedo y cuando alguien viene y se lo lleva, queda un gran espacio abierto a la esperanza.
Lorena de Pablo, 28 de octubre 2015
Lorena de Pablo, 28 de Octubre 2015
CUENTO 35
CUENTO 31
Força de Viver
"Era
uma vez uma menina que se sentia muito infeliz e que não via sentido
para a sua vida.
A dada altura, tentou por fim a vida que resultou numa paraplegia. Ao
princípio foi muito complicado, pois teve que aprender tudo de novo.
Isolou-se muito em casa, sentia-se culpada e muito envergonhada por
andar numa cadeira de rodas. A menina conseguiu arranjar um trabalho.
Desde que começou a trabalhar a sua perpetiva de ver a vida alterou
completamente. Tirou a carta de condução e terminou o 12º ano à
noite. O grupo católico que frequentava foi ao Brasil às jornadas
mundiais da juventude. A menina decidiu embarcar nesta aventura, pois
a possibilidade de ver o papa superava todas as suas limitações,
foi uma experiencia única. A vida dela tomou outro rumo, hoje em dia
vive com mais alegria, tornou-se mais atenta aos outros e acredita
que nada é impossível."
NOTA : No me han enviado la traducción así que lo he traducido yo y, aunque he aumentado en 8 palabras, salen 150.
Paula Pereira, 28 de Octubre 2015,
NOTA : No me han enviado la traducción así que lo he traducido yo y, aunque he aumentado en 8 palabras, salen 150.
Fuerza para vivir (Traducción al español)
"Érase una vez una chica que se sentía muy infeliz y que no encontraba sentido a su vida. Intentó poner fin a su vida y quedó parapléjica. Al principio fue muy complicado porque tenía que aprender todo de nuevo. Pasaba mucho tiempo en casa. Se sentía culpable y se avergonzaba por tener que desplazarse en una silla de ruedas. La chica encontró un trabajo. Desde que encontró un trabajo su vida cambió por completo. Se sacó el carnet de conducir y compaginó el trabajo con los estudios nocturnos para terminar su formación. El grupa católico que frecuentaba fue a Brasil a las Jornadas Mundiales de la Juventud. La chica decidió embarcarse en esta aventura, puesto que las posibilidades de ver al Papa, superaba todas sus limitaciones, fue una experiencia única. Su vida dio un giro y hoy en día vive con más alegría, se interesa más por los demás y puede decir que nada es imposible".
CUENTO 32
Coge
mi mano
"Desde
muy joven María supo que la vida no era fácil, pero ella bailaba
con la dificultad. ¿Quién decidía dónde están los límites? No
soportaba la idea de quedarse atrás. Quería hacer lo normal para su
edad y así lo hizo. Donde casi todo el mundo veía esfuerzo o afán
de superación, ella veía normalidad. Sí, es cierto, quizá costaba
un poco más, pero nunca creyó que estuviese haciendo algo fuera de
lo normal.
Un
día, conoció a alguien en su misma situación. Era como mirarse en
un espejo. Pero aquel espejo era gris, sin motivación, sin
vitalidad. Aquel espejo devolvía una mirada apagada. Ese triste
reflejo preguntó:
-¿Cómo
lo haces?
Ella
respondió:
-La
vida es como una bola del mundo a la que alguien hace girar empujando
con la mano. Ese alguien no va a dejar de empujar porque tu te hayas
parado. ¿Te subes conmigo?
Tendió
su mano."
Lorena de Pablo, 28 de octubre 2015
CUENTO 33
En
un momento
"Su larga melena les tapaba la cara. A ella le molestaba, a él le divertía. Había sido raro alcanzar aquella postura horizontal. Hacía tiempo que se había peleado con las coletas y las gomas del pelo. Hacía tiempo que no le encontraba todo el gustillo a tumbarse en la cama. Sin embargo, allí estaba, rompiendo todos sus esquemas. Aquello contra lo que había estado luchando y contra lo que su mente se había resistido, estaba sucediendo. Dentro de las mil maneras de entenderse que hay, sólo fue una conversación. Sólo y mucho más. Fue perderse y encontrarse. Estamos acostumbrados a vivir con miedo y cuando alguien viene y se lo lleva, queda un gran espacio abierto a la esperanza.
No
pudieron parar el tiempo, pero fue suficiente. Aquel día aprendió
que la vida también puede cambiar para bien en un momento. Puede
cambiar tantas veces como momentos tiene el día."
Lorena de Pablo, 28 de octubre 2015
CUENTO 34
Un
soplo de aire
"Sentada
frente a la ventana.
Ese
era el resumen de sus días, ver la vida pasar frente a la ventana.
La vida de los demás, claro. Padres que llevaban a sus hijos al
colegio, niños jugando, parejas de novios, gente con prisa, gente
sin ella…
El
paisaje cambiaba, las estaciones pasaban, la vida se escapaba. Su
estación favorita era el invierno. Experimentaba un sutil placer
viendo nevar. Habían pasado muchos inviernos desde que un duro golpe
le había cambiado la existencia. Ella había aceptado su destino o,
simplemente, se había sentado a convivir con él.
Aquella
mañana grandes copos deleitaban su vista. Alguien abrió la ventana
y un soplo de aire gélido golpeó su cara. Por fin abrió los ojos.
Lo vio todo claro. Se había cansado de vivir la vida de los demás.
Empujó sus ruedas, cogió su abrigo, abrió la puerta y salió. Su
vida comenzaba de nuevo".
Lorena de Pablo, 28 de Octubre 2015
CUENTO 35
Las manos de mi madre
"Las
manos de mi madre me abrazaron y me acogieron al nacer
eran
cálidas y me arroparon con amor.
Las
manos de mi madre me guiaron por la vida de niña,
me
peinaban, me protegían y curaban las heridas.
Cuando
fui adolescente y joven, me señalaban lo que estaba bien y lo que
no,
me
censuraban, a veces con excesiva firmeza,
y
yo las rechazaba, me enfadaba, me distanciaba,
porque
necesitaba libertad, independencia, autonomía.
Sus
manos vibraban cuando cantaba, pintaba, o escribía poesías
pero
sobre todo cuando emocionada cogió a su nieta por primera vez.
Sus
dedos finos, sus uñas almendradas,
tan
bellas y elegantes,
siempre me gustó mirarlas.
Las
manos de mi madre ahora tiemblan pero siguen siendo hermosas,
me
hacen sentir ternura y son las mías las que la acogen y acarician."
Concha Perelló, 28 de octubre 2015
NOTA : Este año voy igualar la letra de todos los cuentos que enviéis para que se lean con la misma facilidad.
Quienquiera puede ilustrar el dibujo.¡Animaros a participar y suerte!
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